Salvo Gambia, ningún país, incluidos los que integran el G20, tiene un plan climático que cumpla con sus obligaciones en virtud del Acuerdo de París, que se firmó en el 2015, según un informe del organismo de control Climate Action Tracker (CAT).
Esto ocurre, a pesar de las reiteradas advertencias de los científicos, quienes aseguran que «se necesitan recortes profundos en las emisiones de gases de efecto invernadero».
El CAT analizó las políticas económicas de 36 países, incluidos los 29 que integran la Unión Europea, y descubrió que ninguno es «compatible con los 1,5 grados centígrado». Todos juntos representan el 80% de las emisiones mundiales, de ahí la gravedad del tema.
El análisis también incluyó algunos países de bajas emisiones y encontró que Gambia era la única nación, entre las 37, «compatible con los 1,5 grados centígrado», aunque puede haber otros, ya que el estudio no abarcó a todo el mundo.
Según el Acuerdo de París, de 2015, más de 190 países pactaron limitar el aumento de las temperaturas globales muy por debajo de 2 grados por encima de las temperaturas preindustriales, idealmente a 1,5 grados centígrados.
Los científicos establecieron que 2 grados centígrados es un umbral crítico para algunos de los ecosistemas de la Tierra, y es uno que también desencadenaría más eventos climáticos extremos catastróficos.
El informe llega a menos de dos meses de las conversaciones internacionales sobre el clima, mediadas por la ONU, en Glasgow, conocidas como COP26, donde el presidente del evento, el parlamentario británico Alok Sharma, afirmó que espera «mantener vivo el 1,5» como límite del calentamiento global.
El CAT informó que el progreso se estancó luego de que docenas de líderes mundiales hicieron nuevas y ambiciosas promesas de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero durante la Cumbre de Líderes Climáticos del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en abril.
«En mayo, después de la Cumbre de Líderes Climáticos y el Diálogo de Petersburgo, informamos que parecía haber un buen impulso con nuevos compromisos de acción climática», señaló Niklas Höhne, socio fundador del NewClimate Institute, socio de CAT.
«Pero desde entonces, ha habido poca o ninguna mejora: nada se mueve. Cualquiera pensaría que tiene todo el tiempo del mundo, cuando en realidad ocurre lo contrario», agregó.
Apenas seis naciones, como por ejemplo Reino Unido, tienen una política climática general que es «casi suficiente», según el informe, que agrega que los objetivos de Estados Unidos, la Unión Europea y Japón están «relativamente cerca de donde deben estar», aunque «sus políticas internacionales no lo están».
Según el Acuerdo de París, los países presentaron sus compromisos de reducir las emisiones, también conocidas como Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional o NDC, para el 31 de julio de 2021, aunque hay más de 70 países que ni siquiera enviaron una actualización.
India, Arabia Saudita y Turquía se encuentran entre los países que no cumplieron con la fecha límite y China, el mayor contaminador del mundo, anunció un nuevo objetivo, pero no lo presentó formalmente ante la ONU.
Y muchas naciones presentaron una «actualización» sin aumentar realmente su compromiso, como Brasil y México; en tanto que Rusia si lo hizo «desde el papel», pero en la realidad «no representa un cambio significativo».
La reducción de emisiones es una parte no negociable del Acuerdo de París. El dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero atrapan la radiación solar en la atmósfera, al igual que el vidrio atrapa el calor en un invernadero. Esto hace que las temperaturas aumenten e impulsa el clima más extremo, el derretimiento del hielo, el aumento del nivel del mar y la acidificación de los océanos.
Para mantener el calentamiento por debajo de 1,5 grados, el mundo debe llegar a cero neto para 2050, según mostró un informe de la ciencia climática de la ONU, publicado en agosto. Esto se refiere a un estado en el que la cantidad de gas de efecto invernadero emitido no es mayor que la cantidad eliminada de la atmósfera.