El candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami pidió unidad a la oposición chilena para reclamarle la renuncia al presidente Sebastián Piñera, luego de conocerse la denuncia sobre su supuesta participación en la venta de una empresa minera a través de un paraíso fiscal revelada por la investigación periodística internacional denominada «Los Pandora Papers».
El aspirante del Partido Progresista (PRO) y fundador del Grupo de Puebla afirmó a través de un video que «corresponde que, de manera responsable, el presidente dé un paso al costado, porque la confianza está rota».
«No están dadas las condiciones para que un mandatario, ante tamaña denuncia, continúe en su cargo», agregó Enríquez-Ominami.
Según la investigación periodística, Piñera y algunos familiares eran los mayores accionistas del proyecto Minera Dominga, con 33% de sus acciones, y vendieron la empresa minera a través de un paraíso fiscal en las islas Vírgenes Británicas.
Apenas conocido el escándalo mundial, La Moneda emitió un comunicado rechazando el asunto, alegando que los hechos «fueron investigados en profundidad por el Ministerio Público y los Tribunales de Justicia durante 2017, y la Fiscalía recomendó terminar la causa por la inexistencia de delito y la falta de participación del presidente».
«Se reitera que el presidente de la República no ha participado en la administración de ninguna empresa desde hace más de 12 años, antes de asumir su primera presidencia en marzo de 2010», continúa el texto de su oficina.
Finalmente, el escrito desde La Moneda asegura: «La existencia y su participación en esas sociedades fue informada desde el inicio a las autoridades regulatorias, cumpliendo en plenitud con la ley y pagando todos y cada uno de los impuestos que por dichas inversiones resultaban exigibles en Chile».
Sin embargo, Enríquez-Ominami calificó a Piñera de ser «el presidente de sus negocios» y a su juicio consideró que el actual presidente «nuevamente ha fallado, le ha fallado a su pueblo, no ha sido transparente».
MEO, como se lo conoce popularmente por sus iniciales, afirmó: «La oposición chilena tiene que estar unida y avanzar derechamente hacia una comisión investigadora, hacia el uso de una herramienta constitucional que existe, la norma del artículo 52, que exige una acusación constitucional por hechos de la más alta gravedad», enfatizó.
«Chile no puede estar en manos de alguien que solamente cuida los negocios familiares y no los intereses de la Patria», sentenció.
El escándalo de los Pandora Papers se conoció el pasado domingo y expone a otros presidentes de América Latina, y a más de 330 altos funcionarios o ex funcionarios de 91 países, como a otras figuras mundiales.