La Junta de Supervisión Fiscal (JSF) aprobó la ley que habilita el polémico Plan de Ajuste de la Deuda (PAD), pero la división persiste entre aquellos que lo ven como una salida a la multimillonaria quiebra y los que temen una crisis más profunda en Puerto Rico, uno de los dos estados libres asociados con estatus de autogobierno de los Estados Unidos.
El PAD se oficializó cuando el gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, firmó el Proyecto de la Cámara 1003, previamente aprobado por ambas cámaras legislativas, y el cual propone, entre sus medidas, recortar la deuda pública del Gobierno local de más 70.000 millones de dólares a 34.000 millones
«Revisamos cuidadosamente la Ley 53 de 2021, antes el proyecto de la Cámara 1003, adoptado por la Legislatura de Puerto Rico y firmada por el gobernador Pedro Pierluisi el 26 de octubre de 2021 y concluimos que los cambios hechos por la Legislatura a la legislación enmendada luego de la audiencia del 25 de octubre por el tribunal federal del Distrito de Puerto Rico conforma la base para la emisión de nuevos bonos de obligación general, lo que es parte del séptimo Plan de Ajuste», indicó la JSF en una declaración escrita.
Según el organismo, la medida permitirá continuar adelante sin entrar en un proceso de mediación como había ordenado la jueza Laura Taylor Swain el pasado lunes, en caso de que las partes continuaran en desacuerdo.
«Me siento aliviado y satisfecho de que estamos de nuevo en curso para movernos adelante con el PDA para finalizar la dolorosa quiebra de Puerto Rico», sostuvo el presidente de la JSF, David Skeel.
El plan reduce la deuda del gobierno central «a niveles sostenibles» y confirma que proveerá la base para «un crecimiento económico sostenible”.
Tras conocer la decisión del organismo, el gobernador Pierluisi consideró que Puerto Rico «va camino a su recuperación».
«La sabia decisión de seguir adelante con la confirmación del PDA para viabilizar la reestructuración de la deuda del gobierno es un gran paso hacia el futuro prometedor de Puerto Rico», agregó.
Pierluisi le agradeció a la JSF «su disponibilidad de llegar al consenso que Puerto Rico necesita para redirigir los esfuerzos hacia la reconstrucción de la isla».
«El plan es esencial para terminar con el proceso de quiebra y regresar al progreso», concluyó.