El primer ministro de Haití, Ariel Henry, denunció que intentaron asesinarlo el sábado en la comuna de Les Gonaïves, donde se celebraba el aniversario de la independencia de su país.
«Han intentado algo contra mí, personalmente», aseveró Henry visiblemente consternado ante la gravedad del hecho.
Asimismo, su oficina de prensa advirtió que el primer ministro fue «blanco de un atentado con detonaciones de armas automáticas, después del acto religioso que abrió la fiesta nacional».
Enfrentamientos entre la policía y grupos armados estallaron durante la celebración en Les Gonaïves, a 150 kilómetros al norte de la capital, Puerto Príncipe.
Bajo ráfagas de disparos, Henry y los oficiales debieron abandonar precipitadamente la ciudad donde se firmó la declaración de independencia de Haití, el 1 de enero de 1804.
En fotos transmitidas por su gabinete, se ve un impacto de bala en el parabrisas del vehículo blindado del primer ministro.
A finales de diciembre, grupos de ciudadanos y miembros de bandas armadas de Gonaïves, la tercera ciudad más grande de Haití, expresaron de forma violenta su oposición a la llegada del mandatario.
«Yo sabía que corría ese riesgo», confirmó Henry, quien de ninguna manera iba a dejar que lo amedrentaran.
Sus palabras fueron reforzadas por Prensa del Ejecutivo, que denunció que «bandidos y terroristas» serían los responsables del intento de magnicidio y que ya hay órdenes de arresto contra los sospechosos.
Al menos tres muertos y dos heridos dejó el tiroteo
Al menos tres muertos y dos heridos dejó el tiroteo, aunque esto no fue confirmado por fuentes oficiales.
El muerto confirmado es Yves Durogene, asesinado de un disparo sobre el costado izquierdo de su pecho.
Henry había llegado a Les Gonaïves pese a las amenazas de opositores como las Fuerzas Revolucionarias de Raboto, quienes lo acusan de tener relación con el asesinato del presidente Jovenel Moïse, ocurrido el 7 de julio de 2021.
El ministro de Justicia, Berto Dorcé, anunció la apertura de una investigación, y acciones públicas contra los autores y cómplices de los «actos de bandidaje, que no quedarán impunes», según publicó en la red Twitter.
Días antes de los hechos del sábado, hombres armados habían disparado contra empleados que construían el stand oficial y uno de ellos salió gravemente herido.
El pasado 17 de octubre, al cumplirse 216 años del asesinato del líder independentista Jean Jacques Dessalines, Henry llegó a Pont Rouge en la capital para depositar una ofrenda floral, pero tuvo que abandonar la zona en medio de fuertes detonaciones de armas automáticas.
