El presidente del Consejo de Ministros de Perú, Héctor Valer, renunció a su cargo, a cuatro días de asumir, después de que el presidente Pedro Castillo anunciara que volvía a recomponer el gabinete ante el fuerte rechazo que generó su designación en medio de denuncias de violencia doméstica.
«Vengo a decirles que acepto la derrota, ametrallado por los periódicos del Perú que pertenecen a un grupo que construyeron una imagen de maltratador y de violento de este combatiente. Han herido a un premier y por eso se retira a sus cuarteles para curar sus heridas y volver cuando el pueblo así quiera», aseguró Valer en conferencia de prensa.
«Yo reconozco mi derrota, pero mi derrota a través de portadas de periódicos construidas sobre hechos falsos. Ojalá así reconocieran sus derrotas aquellos que perdieron y que hasta ahora dicen que el presidente de la República es comunista”, agregó.
«He presentado una carta de puesta a disposición (del cargo) al presidente de la República», continuó.
Sin embargo, Valer advirtió que tras dejar el cargo va a «querellar a las personas que mancharon su nombre y dignidad», entre los que mencionó a un comunicador que, según dijo, también lo vinculó con el narcotráfico.
Varias fuerzas parlamentarias habían adelantado que no darían su aval al nuevo gabinete por las denuncias de violencia familiar que pesaban sobre Valer, acusado de haber agredido físicamente a su esposa y a su hija.
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Historia del conflicto
En el mensaje a la nación que dio en la noche del viernes para anunciar la recomposición ministerial, el presidente de Perú, Pedro Castillo, no hizo referencia a la polémica en torno a su jefe de Gabinete y culpó al Congreso por no querer convocar para el sábado la sesión de validación al nuevo equipo de Gobierno.
«El presidente del Consejo de Ministros solicitó el día de hoy al Congreso exponer la política general de Gobierno con la inmediatez que amerita. Sin embargo, el Congreso ha expresado su negativa a este urgente pedido. Por ello, he tomado la decisión de recomponer el gabinete ministerial», se quejó Castillo.
En tal sentido, Valer manifestó; «Aprovecho la oportunidad para comunicarles que de acuerdo al artículo 130 de la Constitución Política del Estado y de acuerdo al artículo 82 del reglamento del Congreso, venimos a pedir a la señora presidenta que el día de mañana 5 de febrero, a la hora que ella y el honorable Congreso de la República decidan, nos precise la hora porque queremos exponer y debatir a la digna representación nacional la política general del Gobierno y las principales medidas a adoptar durante la gestión de este Consejo de Ministros, a cuyo efecto esperamos la respuesta de la señora presidenta.
Pero la presidenta del Congreso, María del Carmen Alva (Acción Popular), no solo rechazó la propuesta, sino que además admitió que le causó extrañeza la decisión de Valer de acudir al Parlamento para solicitar que el sábado se realizara el Pleno, cuando normalmente se coordina de manera verbal y no por escrito.
«Normalmente estas cosas no se hacen por escrito, se coordina la reunión y es un acuerdo verbal con base en la agenda que tengamos nosotros. Nos extraña desde el punto de vista que ayer él mencionó que iba a tener una ronda de reuniones con todas las bancadas para explicar la política antes de la fecha que se acuerde para presentarse con el gabinete. Lo ha hecho de otra manera, habrá cambiado de opinión», remarcó.
«Nos reuniremos con la Junta de Portavoces, veremos la agenda y próximamente le daremos la fecha que será muy pronto y que acordaremos (…) Lo haremos cuando tengamos una reunión y veremos cuál es la mejor fecha a la brevedad posible, pero mañana definitivamente no», sentenció Alva.
También criticó las declaraciones de Valer, en las que hacía referencia a una metafórica «bala de plata» que estaría gastando el Parlamento peruano si decide rechazar al nuevo gabinete, al afirmar que en tal caso el presidente Pedro Castillo podría optar por disolver el Congreso.
«Exigimos desde el Congreso que el presidente se deslinde de estas declaraciones. Queremos saber si esto es lo que quiere el Poder Ejecutivo. Amenazar al Congreso para que votemos en contra de esta confianza nombrando a este ‘premier’ que no es el idóneo», reclamó la parlamentaria, que pertenece al partido Acción Popular, aliado del oficialismo.
En ese sentido, Alva recordó que el mandatario afirmó en una entrevista periodística que no cerraría el Congreso, por lo que exigió explicaciones por los distintos «mensajes» que da al país.
«Tienen que saber que acá en el Congreso estamos los 130 congresistas que vamos a defender nuestro Parlamento, como lo hemos dicho innumerables veces, hasta con la vida si es necesario. No vamos a permitir que la democracia se interrumpa. Sin Congreso no hay democracia», aseveró.
La polémica suscitada por esta nueva designación ha creado una nueva crisis en el seno del Gobierno de Castillo, quien aparentemente no descartaría la posibilidad de nombrar en lugar de Valer a Roberto Sánchez, uno de los candidatos propuestos en un primer momento pero que finalmente fue designado como nuevo secretario de Comercio Exterior.
Castillo había nombrado esta semana su tercer equipo de Gobierno desde que asumió el cargo, en julio del año pasado, tras la sorpresiva dimisión de la anterior primer ministro, Mirtha Vásquez, por desacuerdos sobre ascensos en la Policía. Cada día suma un nuevo problema.
