La Corte Suprema de Justicia de Honduras denegó el pedido de prisión domiciliaria hecho por el expresidente Juan Orlando Hernández, quien aguarda una posible extradición a Estados Unidos, que lo reclama por presuntos vínculos con el narcotráfico y el crimen organizado.
La decisión fue adoptada por la mayoría de los votos de la Corte, tras un recurso de apelación presentado por la defensa de Hernández, quien basó su pedido en cuestiones de salud y seguridad.
Hernández fue detenido el pasado 16 de febrero cuando dejó de tener inmunidad presidencial, aunque poco después de abandonar el cargo juró como diputado del Parlamento Centroamericano, lo que le confiere este mismo beneficio.
Desde entonces está recluido bajo estrictas medidas de seguridad en un centro de detención en Tegucigalpa.
Pedido de Estados Unidos
La Fiscalía de Nueva York confirmó en febrero de 2021 la existencia de una investigación por narcotráfico contra el expresidente hondureño.
De hecho, su hermano, Antonio Hernández, ya fue condenado a cadena perpetua por narcotráfico.
El nombre del expresidente Hernández ya había salido previamente en las investigaciones, dado que los fiscales aseguraron que tuvo contacto con el narcotraficante mexicano Joaquín «El Chapo» Guzmán.
De acuerdo con las informaciones, la revelación tuvo lugar durante una sesión en la que se confirmó la participación del narcotraficante Geovanny Fuentes Ramírez, quien habría financiado en 2013 la campaña presidencial de Hernández a cambio de protección.
