AMLO, presidente de México, mantiene la incertidumbre sobre su asistencia a la Cumbre de las Américas, que Estados Unidos organizará del 6 al 10 de junio en Los Ángeles, al condicionarla a que su par estadounidense, Joe Biden, invite a todos los países de la región, incluidos Cuba, Nicaragua y Venezuela.
«Vamos a esperar la respuesta de lo que estamos planteando. Insisto, no hay prisa, estamos muy cerca (de Estados Unidos), hay varios vuelos afortunadamente a Tijuana, y de allí en carretera a Los Ángeles», sostuvo el mandatario mexicano en su tradicional conferencia de prensa matutina.
Su postura la secundaron países como Bolivia, Guatemala y naciones de la Comunidad del Caribe (Caricom), mientras que Argentina, Honduras y Chile replicaron las críticas aunque sin retirar su asistencia.
«Ayer un funcionario de Estados Unidos muy cercano al presidente Biden, Juan González (asesor para Latinoamérica de la Casa Blanca), habló de que todavía no están terminadas las listas o hace falta distribuir algunas invitaciones, vamos a esperarnos», insistió AMLO.
El jefe de Estado mexicano precisó que con el equipo de Biden se «caen bien y respetan», por lo que está a la espera de que «se tome una decisión».
Biden, por su parte, manifestó que «quiere personalmente» López Obrador asista la cita, según precisó ayer González a periodistas.
Si bien el presidente mexicano consideró que «aún hay tiempo para enviar las invitaciones», su homólogo cubano, Miguel Díaz-Canel, ya anunció que en ningún caso irá a la futura reunión continental de jefes de Estado y Gobierno.
Pese a su posible ausencia, López Obrador dejó bien en claro que México «va a estar presente» a través de su canciller, Marcelo Ebrard, según reportó la agencia de noticias Sputnik.
«Ante cualquier circunstancia, las relaciones con Estados Unidos van a seguir siendo buenas, porque son relaciones de amistad», agregó.
Por último, López Obrador sostuvo: «No es un asunto de pleito, de confrontación, es muy buena la relación con el Gobierno del presidente Biden, es una gente con mucha experiencia política, es conciliador, una persona con buenos sentimientos, nos llevamos bien, vamos a esperar y ante cualquier circunstancia las relaciones con Estados Unidos van a seguir siendo buenas», concluyó.