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Chile, el país latinoamericano en el que más se usan las tarjetas para pagos

Los chilenos son las que más utilizan las tarjetas de crédito o débito para cubrir sus gastos en América Latina, de acuerdo al XI Informe de Tendencias de Medios de Pago presentado por Minsait Payments, la filial de medios de pago de la consultora de tecnología Minsait.

El estudio reveló que el 89% de los chilenos bancarizados utilizaron las tarjetas en el último mes, por delante de los argentinos (83,3%), México (80,5%) y Perú (78%): mientras que los colombianos son los que menos las usaron (63,2%).

Otro dato del informe que refuerza esta tendencia es que Chile es uno de los países con mayor tenencia de tarjetas de débito (97,8%), crédito (71,8%) y prepago (37,3%) entre los bancarizados, con un crecimiento cercano a los 10 puntos porcentuales en las dos últimas modalidades con respecto al año anterior.

Además, según el estudio, la pandemia impulsó la adopción de la modalidad sin contacto, o contactless, en el pago con tarjeta.

El 83,5% de los chilenos bancarizados ya usa contactless, por lo que este año encabeza el ranking como el país latinoamericano que más utiliza este tipo de tarjetas, seguido por Perú (77,5%), Argentina (72,1%) y México (63,1%).

Entre las principales ventajas que explican estas preferencias frente al efectivo, están, por ejemplo, su rapidez, facilidad de uso y comodidad.

El efectivo, el medio de pago más común

A pesar de los altos registros en el uso de tarjetas, el informe apuntó que el uso del efectivo sigue siendo percibido por la industria como el medio de pago más común, de acuerdo al 44% de los encuestados.

El informe también destacó el quiebre de la tendencia de la caída del volumen de efectivo en circulación ocasionado por la pandemia de coronavirus.

En todos los países hubo un incremento significante en el uso de este método de pago, con un fuerte salto en Chile (40% respecto a 2019), Perú (27%) y República Dominicana (13%).

Al mismo tiempo, el estudio concluyó que el efectivo no será el medio de pago mayoritario en el futuro, ya que solo uno de cada siete encuestados considera que este será el método dominante para 2030.

El informe dejó en claro que las tarjetas de pago (34%) y los pagos desde cuenta (33%) se convertirán en los medios de pagos dominantes.

Medios alternativos

Según el estudio, los bancos tradicionales comenzaron a ceder espacio en favor de nuevos proveedores de servicios de pago en todos los países.

Aunque el banco sigue siendo la entidad con la que más se opera en términos financieros, en América Latina las compañías de telecomunicaciones, a través de créditos personales, y los neobancos ganan cada vez más terreno.

De hecho, más del 50% de los adultos bancarizados de latinoamérica respondieron que cuentan con algún producto o servicio de dos o más bancos.

Los clientes financieros de Brasil, Perú y Chile lideraron esta categoría con el 76,4%, 69,7% y 65,3%, respectivamente.

«En Brasil y Colombia, el 26% de la población bancarizada indica como entidad financiera principal un neobanco, algo explicado no solo por la gran presencia de este tipo de entidades, sino también por la edad, ya que son los grupos más jóvenes en estos dos países los que en mayor medida operan con estas entidades y las identifican como principales», explicó el informe.

Otro fenómeno creciente en América Latina es la tendencia de adopción del sistema de financiación «compra ahora y paga después» (BNPL, por sus siglas en inglés).

El servicio permite a los compradores adquirir un producto y pagar en su totalidad o a plazos, sin intereses para el fraccionamiento a corto plazo, pero sí con comisiones cobrada por el proveedor de BNPL.

En relación a este sistema, Chile es el país de la región que tiene el menor nivel de conocimiento y uso de este, reconocido por un 15% de la población y utilizado por el 26,7%.

Junto con Brasil, es también el país con menor intención de uso de este sistema a futuro, en contraste con el elevado crecimiento que se espera en países como República Dominicana, Ecuador o México.

Una vez superada la fase más dura de la pandemia de coronavirus se consolidó la tendencia de convivencia entre distintos medios de pago iniciada en 2020, que son empleados por los consumidores en función de sus preferencias y las alternativas ofrecidas. En este contexto, aunque se recuperó el uso del efectivo, la tarjeta conservó su protagonismo en la mayoría de los países de América Latina.