El plebiscito de salida de la nueva Constitución de Chile, que se votará el 4 de septiembre próximo, aún no tiene definición, según los diversos sondeos, ya que reina la indecisión (37%) en la mayor parte de la población, principalmente en los sectores rurales (42%) y entre las mujeres (39), de acuerdo a la última encuesta del Centro de Estudios Publicos (CEP).
Entonces, ante el empate técnico entre el Apruebo (25%) y el Rechazo (27%), los indecisos toman cada vez más importancia.
De hecho, las distintas fuerzas políticas ya miran con mayor atención el dato, sobre todo porque el poder convencer a ese segmento de la población será clave al momento de definir el resultado final.
Por lo tanto, el identificar a los que aún no se definen adquiere mayor relevancia y, según se puede observar en los datos desagregados de la encuesta, ese 37% de indecisos se desglosa de la siguiente manera:
Así, en el área urbana un 36% se encuentra indeciso, mientras que en las rurales ese porcentaje sube a 42%.
En cuanto al género, el 35% son hombres, mientras que el 39% mujeres, otro dato que llamó la atención.
No obstante, en los cuatro rangos etarios medidos los indecisos se reparten de forma mas o menos equitativa: de los 18 a los 29 años (38%); de 30 a 44 años, al igual que los mayores de 60 (36%); y de 45 y 59 años (39%).
Estas cifras son de vital importancia a la hora de planear una estrategia comunicacional para las campañas de cara a la votación.
Posición política
El sondeo del Centro de Estudios Públicos también desagregó la posición política de los consultados: un 37% respondió no tener una postura tomada; un 28% se declaró de centroizquierda o de izquierda; mientras que el mismo porcentaje se identificó de centroderecha o de derecha; y un 44% de centro.
La encuesta preguntó cuáles son las dos razones por las que las personas se inclinarían por una de las tres opciones y, en el caso de los indecisos, un 49% apuntó a que se debe «a falta de información», mientras que un 27% indicó que aún «‘no ha leído (el borrador) o no lo ha pensado».
En tanto, un 17% señaló que su indefinición obedece «a una mala evaluación del funcionamiento de la Convención Constitucional»; un 12% afirmó que su respuesta se debe «a que el órgano redactor todavía no finalizó su trabajo»; y finalmente un 10% sostuvo «no entender la propuesta constitucional».
No, pero sí
La discusión sobre la continuidad del proceso constituyente en caso de que gane el Rechazo también fue abordada por la encuesta: un 42% se mostró a favor de esta medida, ya que ve necesario una nueva Constitución.
De ese porcentaje, un 44% reside en áreas urbanas y un 30% en zonas rurales; mientras en materia de género hubo un «empate» con un 42%.
En cuanto al rango etario, los más jóvenes -18 a 29 años- son los más propensos a la opción de tener un nuevo proceso constituyente, con un 47%; seguidos de las personas de entre 30 y 44 años, con un 43%; luego las de entre los 45 a 59 años, con un 40%; y por último las de 60 o más, con un 38%.
Finalmente, la posición política de los que son partidarios de tener una nueva Constitución en caso de que gane el Rechazo -teniendo como referencia el 42% que dio como preferencia esa opción al ser consultados- se desglosa de la siguiente manera: el 61% es de centroizquierda o izquierda; un 42%, de centro; y un 20% de derecha o centroderecha.
Convencionales y acuerdos
Uno de los puntos de la encuesta del CEP que generó una tendencia más definida fue cuando se les preguntó a los encuestados su punto de vista en torno al alcance de acuerdos en la CC, puntualmente si preferían que los convencionales privilegiaran sus propias posturas o las dejaran de lado con el afán de alcanzar grandes consensos por el bien de la ciudadanía.
El 69% de los consultados contestó que los constituyentes debían privilegiar los acuerdos, y al hacer el desglose por zonas urbanas y rurales, la tendencia se mantuvo.
De hecho, un 69% de esos dos segmentos señaló que los convencionales deben optar por los acuerdos. Y dentro de los géneros, un 72% son hombres; mientras que un 66% son mujeres.
Consultados sobre si la propuesta de nueva Constitución ayudará a resolver los problemas del país, dejará las cosas igual o las empeorará, un 36% contestó que sí ayudará a resolverlos (un
38% reside en las zonas urbanas y un 24% en las rurales); un 26% opinó que dejará las cosas de la misma manera y un 29% consideró que desmejorará la situación.
Sobre el interés que existe por el trabajo de la CC, un 28% se mostró «muy interesado» (30% reside en zonas urbanas y un 8% en rurales); un 24% «algo interesado»; y un 44% «nada interesado» (la mayoría son de sectores rurales).
Otras encuestas, misma tendencia
Los números de Cadem son: Apruebo, 39%; Rechazo, 43%; e Indecisos, 18%; en tanto que los de Pulso Ciudadano son: Apruebo, 29,7%; Rechazo, 41,9%; e Indecisos, 28,4%.
Eso marca por un lado cierto paridad, pero por otro un porcentaje amplio de personas que todavía no decidieron su voto.
«Aún no tuve tiempo para leerlo», «No entiendo mucho del tema», «Tengo otras prioridades», son algunas de las respuestas de los ciudadanos chilenos, de cara a la votación.
La nueva Constitución, que se deberá votar en un referendo el 4 de septiembre, tiene prácticamente dividida a la sociedad, donde las últimas encuestas dan una ventaja al Rechazo al texto, pero no lo suficientemente amplia como para que se mantenga la Carta Magna heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-90) y considerada por muchos como el origen de las grandes desigualdades del país por su corte neoliberal.
