Un estudio realizado por Visa Consulting & Analytics, el brazo de consultoría de Visa, mapeó y diagnosticó a una gran cantidad de municipios de Brasil, México, Colombia y Chile, con respecto al grado de desarrollo de los pagos electrónicos y digitales.
El informe titulado «Índice de Madurez para Adopción de Pagos Electrónico» demostró que solo el 3,8% de las ciudades en Brasil; el 6% en México; el 0,7% en Colombia; y el 2% en Chile tienen un ecosistema de pagos online desarrollado.
Es decir, ciudades en las que hay una mayor adhesión a los pagos digitales, un mayor número de tarjetas y dispositivos para pago por habitante y el acceso a nuevas tecnologías de pago digital, como las tarjetas de proximidad, las billeteras digitales o las aplicaciones que convierten el teléfono celular en un dispositivo para pago, entre otros.
En Brasil, el estudio sobre 5.570 municipios, como Belo Horizonte (Minas Gerais), São Bernardo do Campo (São Paulo), Curitiba (Paraná) y Vila Velha (Espírito Santo), mostró que el 3,8% están listos.
En México, la segunda economía más grande de América Latina, el análisis de 2.456 municipios demostró que el 6% están listos, tales como Delegación Cuauhtémoc (CDMX), Isla Mujeres (Quintana Roo) y León (Guanajuato).
Por su parte, en Colombia, el peor de los cuatro países latinoamericanos, el estudio de 1.122 municipios mostró que tan solo el 0,7% están listos, en ciudades como Medellín, Envigado y Sabaneta (Antioquia), Barranquilla (Atlántico), Bogotá y Chía (Cundinamarca), Bucaramanga (Santander) y Cali (Valle del Cauca).
Por último, en Chile, el país bancarizado con adhesión súper concentrada, el análisis de 344 municipios dejó como saldo que el 2% están listos, como Santiago, Las Condes, Vitacura y Providencia.
Las ciudades o municipios que fueron clasificadas como principiantes, emergentes o en transición -en los cuatro países- necesitan, antes que nada, de inversiones en infraestructura básica para potenciar sus sistemas de pago electrónico.
Uno de los objetivos del índice es fomentar la transición del dinero físico al pago electrónico y digital. Visa espera utilizar la inteligencia generada por el estudio para entender el contexto de cada ciudad con respecto al desarrollo tecnológico y el aumento de la inclusión financiera y digital de la población para, así, planificar acciones estratégicas con emisores, adquirentes y establecimientos comerciales, como identificar comerciantes que aún no aceptan pagos con tarjeta o priorizar los esfuerzos en una determinada localidad para aumentar la cantidad de tarjetas emitidas y la aceptación de pagos digitales.
Un estudio de Roubini ThoughtLab encargado por Visa muestra que la sustitución del dinero físico genera un impacto positivo en los municipios, con mayor crecimiento económico, más recaudación de impuestos, creación de empleo, aumento de la masa salarial y de la productividad, así como ganancias en la eficiencia administrativa.
Para los consumidores y los establecimientos comerciales, los beneficios también son visibles, ya que añaden más comodidad y seguridad, una mejor gestión financiera y una mayor inclusión digital.
«La metodología está ayudando a impulsar estrategias junto con nuestros socios del ecosistema – desde adquirentes, emisores, bancos, sectores industriales, gobiernos – dentro de cada ciudad. El índice nos permite pensar en estos ecosistemas regionales de manera integrada, pero mirando los detalles, las especificidades de cada lugar», sentenció Tania Oliveira, vicepresidente de Visa Consulting & Analytics en América Latina.