El Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia anunció un alto el fuego de cinco días para facilitar la participación de la ciudadanía en las elecciones legislativas del 15 de marzo, una medida que adoptó en citas electorales previas y con la que busca demostrar que apuesta por la «solución política».
«La medida estará en vigor desde la medianoche del jueves 10 de marzo hasta última hora del día 15», detalló la guerrilla en un comunicado.
«Es un gesto con Colombia en el que reafirmamos nuestra apuesta por la solución política y las transformaciones», afirmó el ELN.
Y continuó: «No es un gesto con el Gobierno del presidente Iván Duque, quien estuvo siempre negado a la paz y a cualquier opción de cambio que beneficie a las mayorías», enfatizó.
«Se trata de un alto el fuego unilateral. Solo responderemos en caso de ataque de las Fuerzas Armadas colombianas», advirtió.
«Nos reservamos el derecho a la defensa si son atacadas nuestras unidades o se trata de sacar provecho del cese», aseguró el grupo en el texto.
La tensa relación con Duque
Duque, quien concluirá en agosto su mandato de cuatro años, suspendió las conversaciones de paz que sostenía su antecesor, Juan Manuel Santos, con el ELN por la negativa de los rebeldes a cesar sus ataques.
Surgido en 1964 al calor de la Revolución Cubana, el grupo guerrillero se mantiene en armas tras el acuerdo de paz firmado en 2016 con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El ELN cuenta con unos 2.500 combatientes y una extensa red de apoyo en puntos urbanos.
Hace cuatro años también declaró alto al fuego durante las elecciones legislativas y presidenciales, que fueron las más tranquilas de la historia reciente del país.
El ministro de Defensa, Diego Molano, evaluó que el anuncio del ELN tiene el propósito de «influir en las elecciones para que les abran falsos diálogos de paz o les ofrezcan perdón social».
Las elecciones legislativas implicarán la renovación de la Cámara de Representantes y el Senado, pero para ese día también hay convocadas primarias de los principales bloques que aspiran a salir vencedores de los comicios presidenciales de finales de mayo.
La coalición de izquierda que integra el senador Gustavo Petro encabeza la intención de voto de cara a estas primarias, con un 38%, según un sondeo de Invamer.
Petro se mantiene como favorito para hacerse con la presidencia, con un nivel de apoyo que ronda el 44,6%.
Le sigue Sergio Fajardo, miembro de la coalición de centroizquierda Center Hope, con un 15 %, y el independiente Rodolfo Hernández, con el 13,1%.