El posicionamiento SEO (por sus siglas en inglés Search Engine Optimization) son un conjunto de técnicas que se aplican en una página web con el objetivo de mejorar su posición y su visibilidad en los motores de búsqueda de los principales navegadores.
Cuando un usuario realiza una búsqueda, los distintos sitios web que indexó esa palabra clave aparecerán en una lista de resultados de Google.
Estas páginas web que clasifica son los resultados de búsqueda orgánicos, y el posicionamiento de la página web de la marca es, por lo tanto, clave para llegar a más clientes que estén interesados en los productos o servicios que ofrece.
En otras palabras, podemos definir el SEO como un proceso enfocado a situar una determinada página web en las primeras posiciones de las páginas de los resultados de búsqueda ante una consulta específica de un usuario.
Posicionamiento web: SEO on-page y SEO off-page
El SEO on-page hace referencia al conjunto de técnicas que se aplican en la propia página web que se quiere posicionar. Por ejemplo, algunos factores a la hora de optimizar el SEO on-page de una web son: mejora de la velocidad y optimización de la web; optimización de imágenes; el Sitemap.xml; creación de contenido de calidad; buena experiencia de usuario web; y buena estructura de las etiquetas HTML (H1, H2, H3…).
El SEO off-page de un sitio web se define como el conjunto de técnicas que llevan a cabo fuera de la web de la marca, pero que también ayudan a mejorar el posicionamiento en los buscadores. Por ejemplo, algunas de estas técnicas son: uso de redes sociales; estrategias de Link Building; guest blogging; y registro en directorios (Ej: Google My Business).
Existen tres claves para mejorar el posicionamiento de la web de la marca en los motores de búsquedas:
1) La experiencia de usuario. Es uno de los factores más importantes y que está ganando peso con el paso del tiempo. Si las visitas tienen una buena experiencia en la web, pasan tiempo en ella, convierten y repiten. Es decir, a los usuarios les gusta el contenido que ven e interactúan con él, y esto Google lo tiene muy en cuenta.
2) Optimización web. Tener una web optimizada es clave para mejorar la velocidad y los tiempos de carga. Además, esto influye directamente en la experiencia de usuario.
3) Autoridad de la página. Principalmente hace referencia a la notoriedad o popularidad de la página. Si la web y el contenido que creas aportan valor, los usuarios lo comparten y te enlazan de manera natural, Google sabe que interesa y lo tiene en cuenta a la hora de posicionarla.
También hay cinco técnicas para hacer SEO y mejorar el posicionamiento en los buscadores:
1) Crear contenido de calidad. Es fundamental para mejorar el SEO on-page como el SEO off-page.
2) Elegir un buen hosting. Es clave para optimizar o mejorar los tiempos de carga de la web.
3) Optimizar las imágenes de la web. Las etiquetas Alt y title son imprescindibles para que Google pueda interpretarlas.
4) Hacer un buen uso de las keywords. Identificar estas palabras clave y añadirlas correctamente en las etiquetas (H1, H2…) de la web. Hay que incluirlas de forma sencilla y de manera completamente natural. Google puede detectar un uso abusivo o sin concordancia de estas keywords y penalizar la web.
5) Utilizar una buena herramienta SEO. Sirven para analizar a fondo la web y así brindar recomendaciones para mejorar su posicionamiento en las SERPs de Google. Además, facilita informes con palabras clave y contenido que puede funcionar para la marca.