El multimillonario Elon Musk aseguró que su empresa Neuralink, una compañía de tecnología de interfaz cerebral, está a menos de un año de implantar chips en el cerebro humano, y confirmó que los primeros estudios se realizarían desde el 2022, durante una entrevista en la Cumbre del Consejo de CEO del Wall Street Journal.
«El proceso se acelerará cuando tengamos los chips insertados en humanos, el año que viene (es difícil tener una conversación matizada con monos)», tuiteó Musk.
El implante Neuralink, uno de los proyectos más controvertidos de Musk, está diseñado para ser insertado directamente en el cerebro con el fin de compensar funciones perdidas debido a lesiones neurológicas o de la médula espinal.
Después de probar un modelo funcional en cerdos, en abril pasado se realizó exitosamente otro ensayo clínico en un mono macaco.
«Neuralink está funcionando muy bien en monos. En realidad, estamos haciendo muchas pruebas. El dispositivo se puede quitar de forma segura», subrayó Musk.
«Esperamos tener esto en nuestros primeros humanos, que serán personas que tengan lesiones graves de la médula espinal como tetrapléjicos, tetrapléjicos, el próximo año, pendiente de la aprobación de la FDA (Administración de Medicamentos y Alimentos)», agregó.
El empresario sudafricano de 50 años cree que las personas con problemas de movilidad «volverían a caminar, pero no de forma natural» y también considera que «ayudaría a curar males como la adicción y la depresión».
El 9 de abril de este año, Neuralink mostró su chip cerebral en un mono, lo que permitió al animal jugar un juego de Pong usando solo su mente.
El sistema de la compañía se compone de un chip de computadora conectado a pequeños hilos flexibles con los que un robot cose en el cerebro como una máquina de coser.
Básicamente, el chip capta señales en el cerebro que luego se traducen en controles motores.
El dispositivo en el cerebro del animal registró información sobre las neuronas que se disparaban mientras jugaba, aprendiendo a predecir los movimientos que haría.
«Básicamente, el mono parecía normal, pero está jugando un videojuego telepáticamente, lo que creo que es bastante profundo», remarcó Musk.
La tecnología demostró ser segura en el cerebro y se puede eliminar fácilmente, por lo que lo único que detiene a Neuralink de los ensayos en humanos es la aprobación de la FDA.
«Nuestros estándares para implantar el dispositivo son más altos de lo que aprueba la FDA, al igual que nuestros estándares de seguridad son mucho más altos de lo que exige el gobierno de los Estados Unidos», insistió Musk.
