El fundador y CEO de la automotriz Tesla, el magnate sudafricano Elon Musk, se convirtió en el principal accionista de la red social Twitter tras comprar el 9,2% de sus títulos, según lo anunció la plataforma en un comunicado enviado a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés), una semana después de sugerir su interés en ingresar al sector.
El magnate, de acuerdo al comunicado, compró un total de 73,5 millones de acciones de Twitter de un total de 800,6 millones de títulos que componen el capital social de la empresa, lo cual supone una participación del 9,2%, según consignaron las agencias DPA y Bloomberg.
La compra de Musk, realizada a través del fideicomiso «Elon Musk Revocable Trust» y equivalente a un total de US$ 2.888 millones (según el valor de cierre en bolsa del último viernes), ubicará al empresario como el principal accionista de la plataforma de comunicaciones.
Musk, con un patrimonio de US$ 287.000 millones, es la persona más rica del mundo en la actualidad, según un ranking de la Revista Forbes.
Encuesta y movida estratégica
Semanas atrás, el CEO de Tesla y Space X, y usuario frecuente de Twitter, consultó en una encuesta a sus 80 millones de seguidores sobre si la red social «se adhiere rigurosamente o no al principio de que la libertad es esencial para la democracia».
Dos días después, tras una mayoría que se inclinó por el «No», Musk se preguntó sobre «si era necesaria una nueva plataforma».
«Dado que Twitter cumple una función como una plaza pública y falla en adherirse a los principios de la libertad de expresión, esto socava a la democracia. ¿Qué podemos hacer?», publicó Musk a través de su cuenta personal.
En ese marco, y en respuesta a un usuario, sostuvo estar «pensando seriamente» la creación de una nueva plataforma.
Las acciones de Twitter, luego del anuncio de hoy, presentaron un alza de más del 24% en las operaciones de preapertura de Wall Street.
La compra de Musk, cuyo rol en la compañía aún se desconoce, ocurre meses después de profundos cambios en la cúpula de Twitter, tras la renuncia de su CEO y co-fundador, Jack Dorsey en noviembre último.
Cada vez que un inversor compra el 5% o más de las acciones de una empresa, debe revelar la compra en los archivos de la Comisión de Valores y Bolsa.
Aunque una participación inferior al 10% en una empresa se considera «pasiva» a los ojos de Wall Street, podría indicar un esfuerzo por parte de Musk para adoptar un papel más activo en la gestión de Twitter.
Ese es uno de los factores que impulsaron a otros inversores a comprar acciones y hacer subir la cotización a primera hora del lunes.
«Creo que tiene la intención de actuar y forzar el cambio en Twitter», opinó Dan Ives, analista de tecnología de Wedbush Securities.
«Esto es un disparo a la junta directiva y al equipo de gestión de Twitter para iniciar las discusiones. Es una movida estratégica», concluyó.