FUENTE: EFE
Familiares de un grupo de los más de 200 venezolanos deportados de Estados Unidos y enviados a una cárcel en El Salvador pidieron este miércoles en Caracas al Gobierno del presidente Nayib Bukele la liberación de sus seres queridos, y defendieron su derecho a migrar.
«Mi hijo es inocente», «¡Libertad y justicia ya!», se leía en los carteles que los manifestantes -en su mayoría madres, esposas o hermanas- exhibían junto a fotografías de varios de los jóvenes encarcelados en suelo salvadoreño, en virtud de la Ley de Enemigos Extranjeros invocada por la Administración de Donald Trump para su deportación.
La concentración tuvo lugar frente a la Embajada de El Salvador, país con el que Caracas no tiene relaciones, luego de que ambas naciones expulsaran a los cuerpos diplomáticos en noviembre de 2019.
Una de las manifestantes era Yosleidys Chacón, esposa de Jhon Willian Chacín, un tatuador profesional de 35 años de edad que, durante 14 meses, estuvo en centros de detención en Estados Unidos -primero en California y luego en Texas-, tras lo que pidió su deportación voluntaria.
Sin embargo, pese a que esperaba la llegada de un avión venezolano que lo devolviera a su país, fue enviado a El Salvador, dijo a EFE la pareja, que asegura haberlo reconocido en un video difundido por el Gobierno de Bukele sobre la llegada de migrantes al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot).
«Le pido a Bukele que por favor se coloque la mano en el corazón y los suelte a todos, porque ellos no son ningunos delincuentes», declaró.
Declaraciones de Nicolás Maduro sobre situación en El Salvador
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien juró en enero para un tercer mandato tras su cuestionada reelección, llamó este miércoles «dictadura» al Gobierno de El Salvador, y denunció una «violación masiva de los derechos humanos» de los más de 200 migrantes presos.
Maduro también expresó, en un acto transmitido por la estatal Venezolana de Televisión (VTV), que esos migrantes fueron «enviados a los campos de concentración de la dictadura de Nayib Bukele en El Salvador», donde, señaló, «no han permitido que sus abogados los visiten».
«Ya tienen allá casi tres semanas secuestrados y no ha habido posibilidad de que un cura católico los visite, (…) son delitos graves de lesa humanidad que está cometiendo el Gobierno de El Salvador», sostuvo.
En ese sentido, Maduro expresó que se trata de una «injusticia», al tiempo que rechazó las acusaciones de Estados Unidos de que pertenezcan supuestamente a la banda criminal de origen venezolano Tren de Aragua, señalada como terrorista por Washington.