Luego de una reñida campaña electoral y una intensa labor por demostrar los daños que generó el correísmo en Ecuador, el candidato Guillermo Lasso finalmente ganó los comicios presidenciales y se convirtió en el próximo mandatario de ese país.
Lasso que a diferencia de su contrincante Andrés Arauz, aprovechó la victoria para llamar a la unión, ahora asume el importante reto de cumplir con sus promesas para tratar de sacar al país de la crisis.
Pese a que no ha asumido la Presidencia aún, ya el panorama económico es positivo. De acuerdo con un reporte del diario El Comercio, «hay optimismo en los mercados con la llegada de Lasso».
«Los bonos ecuatorianos se recuperaron y el riesgo país cayó 345 puntos, pasó de 1 169 a 824 puntos», señala el reporte que hace mención a los análisis J.P. Morgan, empresa financiera que realiza estimaciones sobre los bonos desde hace 20 años.
Y es que tras ganar las elecciones Lasso señaló que se centrará en defender la democracia, los derechos de los ecuatorianos, e hizo hincapié en su compromiso con la mujeres y niñas, la población LGBTI y las poblaciones vulnerables. Llamó además a la unión de todos los ecuatorianos.
Ahora Lasso tras asumir la Presidencia tendrá la misión de cumplir con esa promesa de más riqueza y más empleo.
Lasso propuso como eje de su campaña generar nuevos y mejores empleos aprobando nuevos mecanismos de contratación y atraer a la banca internacional. También prometió generar riqueza a partir de los recursos petroleros, mineros y energéticos mediante la participación del sector privado para reemplazar el financiamiento estatal.
Su misión ahora será llamar a los empresarios no solo para atender la economía del país sino para que también la empresa privada pueda aportar en la atención de la pandemia.
Lasso ha explicado que para generar empleo y cumplir con su principal promesa, se deberá promover la inversión en infraestructura tanto pública como privada a través del otorgamiento de créditos productivos al sector agropecuario.
El plan de Lasso además es concesionar la construcción de carreteras en el país para por un lado promover la inversión, y por el otro generar empleo.
“Nuestra prioridad será dar de comer a los ecuatorianos durante toda la crisis de la pandemia y hasta prender la máquina de inversión generadora de empleo”, resaltó Lasso quien además ha dicho que uno de sus principales objetivos será lograr un déficit fiscal del 0%.
