Estudiantes, profesores y miembros de la comunidad universitaria de Harvard se manifiestan el jueves 17 de abril de 2025 en Cambridge, Massachusetts. FOTO: Charles Krupa/AP

Harvard demanda al gobierno de Trump por congelación de fondos y presión ideológica

FUENTE: CNN EN ESPAÑOL

La Universidad de Harvard presentó una demanda contra la administración del presidente Donald Trump, en respuesta a la decisión de su gobierno de congelar más de 2.200 millones de dólares en fondos federales. La acción legal representa una nueva escalada en la confrontación entre la Casa Blanca y una de las universidades más influyentes del país, marcada por acusaciones de antisemitismo, tensiones ideológicas y presión política.

La demanda fue anunciada el lunes por el presidente de Harvard, Alan M. Garber, a través de una carta dirigida a la comunidad universitaria. En ella, Garber alertó sobre las “graves consecuencias reales” que estas medidas tendrían para estudiantes, docentes, investigadores y pacientes, así como para la reputación internacional de la educación superior estadounidense.

El Gobierno de Trump exige el acceso a todos los informes internos relacionados con antisemitismo y prejuicios antimusulmanes en el campus desde octubre de 2023. La Casa Blanca justifica la medida como parte de su cruzada contra el antisemitismo tras las protestas universitarias por la guerra en Gaza, pero Harvard sostiene que se trata de una estrategia de presión para controlar sus programas académicos y limitar su independencia institucional.

“Bajo cualquier nombre, el Gobierno ha interrumpido el flujo de fondos a Harvard como parte de su campaña de presión para obligarla a someterse al control gubernamental”, sostiene la demanda. “Esto, en sí mismo, viola los derechos constitucionales de Harvard”.

Derechos vulnerados y financiamiento en riesgo

La universidad afirma que no busca una restitución económica directa, sino una orden judicial que anule las acciones del Gobierno, las cuales —según argumenta— violan la Primera Enmienda y otras garantías legales.

El caso se centra en la decisión del Departamento de Salud y Servicios Humanos de suspender fondos destinados a investigación médica, científica y tecnológica. Según Harvard, no existe una conexión racional entre esas investigaciones y las preocupaciones del Gobierno por el antisemitismo.

Garber, de origen judío, reconoció en su carta que existen preocupaciones válidas sobre el antisemitismo y aseguró que la universidad ha implementado medidas concretas para enfrentarlo. “Harvard rechaza el antisemitismo y la discriminación en todas sus formas”, expresó, al tiempo que cuestionó el carácter punitivo de las acciones gubernamentales.

La Casa Blanca intensifica su ofensiva

En un comunicado, el portavoz adjunto de la Casa Blanca, Harrison Fields, afirmó que el acceso a fondos públicos “es un privilegio” y que Harvard “no cumple con las condiciones básicas” para conservarlo. Además de los informes, el Gobierno exige la eliminación de programas de diversidad, equidad e inclusión, la prohibición del uso de mascarillas en protestas, reformas en las políticas de admisión y contratación, y una reducción del poder de docentes y administradores.

La administración Trump también ha solicitado los nombres de todas las personas involucradas en la elaboración de informes sobre antisemitismo y sesgo antimusulmán, exigiendo su disponibilidad para ser entrevistadas por funcionarios federales.