Dólar_Economía

¿Por qué el imparable ascenso del dólar es malo para la economía mundial?

El ascenso del dólar -combinado con el aumento de las tasas de interés en Estados Unidos– afectó tanto a América Latina como al resto del mundo no porque solo le pone freno al crecimiento sino que además aumenta el costo de vida, con el valor agregado de la incertidumbre que genera la guerra entre Rusia y Ucrania

«Un dólar fuerte está afectando el crecimiento porque se da al mismo tiempo que una alta inflación, y esa alta inflación se tiene que combatir con altas tasas de interés», explicó Eduardo Carbajal, profesor de Economía y Finanzas del Tecnológico de Monterrey, en México, en diálogo con BBC Mundo.

«Está encareciendo el crédito, no solo en Estados Unidos, sino también en todo el mundo», agregó.

Eso hace que pedir dinero prestado sea más costoso para los países, las empresas y las personas y, por ende, también la actividad se vuelve más lenta y la recuperación más complicada. 

Es como si se tratara de un delicado equilibrio, cualquier movimiento del engranaje económico provoca un efecto en otra parte del sistema.

Importaciones más caras

«El segundo efecto de un dólar en ascenso es que hace subir el precio de los productos importados, lo cual te sube la inflación», afirmó Elijah Oliveros-Rosen, economista senior de la consultora S&P Global Ratings.

«Y, por otro lado, encarece el pago de la deuda en dólares, algo que puede generar presiones fiscales en países que tienen pocos fondos para gastar», añadió.

Con presupuestos fiscales escuálidos, los gobiernos tienen que enfrentar las huellas que dejó la pandemia de covid-19 y la necesidad de ayudas sociales que requieren la mayoría de las familias latinoamericanas que a duras penas pueden resistir una inflación tan elevada.

Al final de cuentas, con un dólar más alto se genera menos consumo y menos inversión fuera de Estados Unidos, lo que sumado a las fuertes fluctuaciones de los mercados financieros no anticipa un camino muy prometedor para los próximos meses.

¿Cuánto se debilitaron las monedas de América Latina?

Esto también ocurrió en las economías emergentes, como las latinoamericanas, que tienen que lidiar con monedas debilitadas, subir sus propias tasas de interés o intervenir para amortiguar la caída de sus billetes.

Comparando las mayores economías de la región, entre 2021 y lo que va de este año, las monedas que más se devaluaron son las de Argentina (-27%), Chile (-18%) y Colombia (-15%), mientras que el real de Brasil fue la única que se apreció (3,7%) en el mismo período.

Frente a ese escenario, si la inflación no cede, es probable que las tasas de interés sigan subiendo, pronostican los expertos.

Y si esto se cumple, la región tendrá que esperar un buen tiempo para recuperar su crecimiento.

¿Salida de capitales?

Lo mismo a nivel global. Por eso los economistas hablan de una «estanflación», que significa poco crecimiento con alta inflación.

Las proyecciones de organismos internacionales señalan que no es descabellado pensar que Estados Unidos y Europa «entren en una recesión» y que China «se desacelere bruscamente y que el crédito se mantenga alto».

Altas tasas en Estados Unidos vuelven a ese mercado más atractivo para los inversores que no quieren correr riesgos y prefieren sacar sus capitales de economías emergentes, un fenómeno que según el Instituto de Finanzas Internacionales (la asociación empresarial mundial de la industria financiera) ya está ocurriendo.

¿Qué tanto se fortaleció el dólar?

El dólar en el 2021 se apreció cerca de un 12% en relación a otras 10 monedas fuertes del mundo, mientras que en lo que va de este año, el incremento fue de un 7%, según uno de los índices más utilizados para medir el desempeño del billete verde: el «Bloomberg Dollar Spot Index (BBDXY)».

Esto ocurre cuando la Reserva Federal de Estados Unidos (FED, por sus siglas en inglés), que es el equivalente al banco central, se embarcó en una progresiva alza de los tipos de interés para frenar la inflación.

Y según las proyecciones del mercado continuará subiéndolas al menos durante todo este año, al tiempo que los inversores siguen comprando dólares como una manera de proteger sus capitales en estos tiempos de incertidumbre económica.

Un gran desafío que está golpeando a las economías avanzadas que vieron una depreciación de monedas como el euro, el franco suizo o la libra esterlina.