«Para el 2025 ofreceremos solo autos híbridos en nuestra línea», confirmó el director ejecutivo de la compañía, Stephan Winkelmann.
«Esto es para reducir las emisiones de CO2 en al menos un 50%», agregó el ejecutivo de la empresa italiana.
Asimismo, Winkelmann pronosticó que el primer automóvil totalmente eléctrico probablemente sea uno de cuatro puertas para uso diario, que será lanzado en la segunda mitad de esta década.
Lamborghini y otros actores del mercado de automóviles deportivos de alta gama, entre los que se encuentran Ferrari, Aston Martin Lagonda y McLaren, están luchando por cambiar sus automóviles a modelos eléctricos sin perder las altas prestaciones que sustentan sus precios premium.
El primer modelo totalmente eléctrico de Lamborghini será un utilitario deportivo (SUV) coupé de cuatro plazas, con un guiño a la tradición de los grandes turismos (GT).
Winkelmann reiteró que Lamborghini hará híbrida toda su gama, incluidos los automóviles deportivos Huracán y Aventador y el SUV Urus, en dos o tres años.
Este calendario, sin embargo, sitúa a Lamborghini por detrás de Ferrari, que ya sacó tres modelos híbridos y prometió tener un automóvil eléctrico con batería para 2025.
Winkelmann dijo que se espera que los volúmenes de ventas para este año estén en línea con los de 2021, cuando la marca envió 8.405 automóviles, y que los pedidos ya están cubriendo buena parte de la producción prevista.
Historia
Automobili Lamborghini Holding S.p.A., comúnmente conocido como Lamborghini, es un fabricante italiano de automóviles superdeportivos fundado en 1963 por el fabricante de tractores Ferruccio Lamborghini con sede y oficinas en Bolognese y que actualmente es parte de la matriz de Volkswagen.
Algunos de los nombres de sus automóviles hacen referencia a nombres de toros bravos de lidia indultados, famosos o históricos, o simplemente palabras relacionadas con la tauromaquia.
Ferruccio, que sirvió en el ejército italiano, se instaló en Sant’Agata Bolognese, en Bolonia, a pocos kilómetros de Maranello, para rivalizar con su vecino Enzo Ferrari, a raíz de una discusión por la calidad de sus coches.
La empresa original se llamaba Automobili Ferruccio Lamborghini SpA, que derivaba a su vez de la Lamborghini Trattori S.A.
Tal fue el éxito de su nuevo negocio que, en 1960, Lamborghini ya era el tercer fabricante industrial italiano en el sector de la construcción de maquinaria agrícola, especialmente de tractores.
Con las ganancias obtenidas, Ferruccio empezó una vida opulenta, adquiriendo algunas propiedades, y sobre todo muchos coches deportivos como Mercedes, Lancia, Maserati y Ferrari.
Era un admirador de Enzo Ferrari por la forma en que mantenía su empresa, pero siempre tuvo una dificultad: Ferruccio tenía problemas mecánicos con sus Ferrari.
El motivo en particular, y la gota que colmó el vaso, fue el embrague de su Ferrari 250 GTB.
Tras numerosas revisiones en el taller, todavía fallaba. Ferruccio decidió comunicarlo a uno de sus mecánicos que, tras desarmarlo y verificarlo, descubrió que era el mismo que utilizaba en sus tractores, claro que con un precio más alto al estar en un automóvil deportivo, lo que le enfureció. Cansado de tener que soportar estos inconvenientes, entabló una conversación con el mismo Enzo Ferrari que pasó a la historia.
Según las palabras del mismo Lamborghini: «Los Ferrari sólo me creaban problemas. Un día, ya harto de mandarlos al taller, llamé a Enzo para decirle que sus coches eran pura basura. Y me contestó que un fabricante de tractores no podía entender sus coches».
A partir de esta curiosa discusión, el iracundo propietario empezó a maquinar la idea de fabricar automóviles deportivos para competir con la marca del Cavallino Rampante.
El primer automóvil Lamborghini fue el Lamborghini 350 GT, luego llegaron el Lamborghini 400 GT y el que sería conocido como el primer súper auto, el Miura, que fue presentado en el Gran Premio de Mónaco, diseñado por Marcello Gandini para la casa Bertone.
Vendrían luego variantes SV, J, y la XQ de carreras. Paralelamente a los superdeportivos con motor V12, se iba realizando otro modelo menos potente y accesible, como el Urraco con motor V8 (1972).
Todos estos nombres son españoles, relacionados con la tauromaquia, que era la pasión de Ferruccio Lamborghini.
