El presidente de Chile, Sebastián Piñera, decretó un Estado de Excepción Constitucional por Emergencia por 15 días, con la participación de las Fuerzas Armadas, ante la «grave alteración del orden público», como definió a las protestas de comuneros mapuches en las provincias de Biobío y Arauco, en la región del Biobío; y en las provincias de Malleco y Cautín, en la región de La Araucanía.
El mandatario explicó en conferencia de prensa que este decreto se debe a los «graves y reiterados hechos de violencia vinculados al narcotráfico, al terrorismo y al crimen organizado» en las zonas del sur de Chile durante las últimas semanas, con lo que agregó «imputaciones y calificaciones penales a la protesta mapuche».
Piñera, sobre la medida, indicó que tendrá una duración «en un principio de 15 días, prorrogables por otros 15 más, según la Constitución y la ley».
Según la actual Constitución chilena en su artículo 42, las provincias bajo la medida quedarán a cargo de los jefes de Defensa Nacional que designe el presidente de la República.
Los dos jefes nombrados fueron el almirante de la Armada Jorge Parga, para la región del Biobío, y del general de Ejército Lionel Curvi, para la de La Araucanía, informó el ministro del Interior, Rodrigo Delgado.
Sobre el anuncio, el gobernador de la región de La Araucanía, Luciano Rivas, señaló que la medida «responde a un fracaso que ha venido ocurriendo por parte del Estado hace muchos años en temas de seguridad».
La diputada comunista Camila Vallejo, por su parte, aseguró vía Twitter que la estrategia del Gobierno con este anuncio es «repetida y fracasada» y que sólo «aumenta el espiral de violencia» en la zona.
En la misma red social, el comunista Daniel Jadue, alcalde de la comuna capitalina de Recoleta, afirmó que Piñera «busca desviar la atención de sus oscuros negocios descubiertos por los Pandora Papers, la militarización de la zona es el camino errado y tendrá duras consecuencias», subrayó.
Según Piñera, el decreto establece que «las Fuerzas Armadas podrán prestar apoyo logístico, tecnológico y de comunicaciones a las fuerzas de seguridad de la zona, más no reemplazarlas para atender la violencia de las localidades».
El conflicto mapuche, un enfrentamiento entre los pueblos originarios que reclaman sus tierras ancestrales contra las fuerzas de seguridad del Estado, que data de hace muchos años en el sur de Chile, se tensionó luego de conocerse la muerte de la estudiante de derecho y colaboradora de la ONG Defensoría Popular, Denisse Cortés, de 43 años, en medio de una protesta mapuche en el centro de Santiago el pasado domingo.