La cantidad de personas fallecidas por las peores inundaciones que sufre Malasia en los últimos años ascendió hoy a 27 (20 en Selangor y 7 en Pahang), mientras el Gobierno acelera las operaciones de limpieza para que cerca de 70 mil personas puedan volver a sus hogares luego de los daños que provocó este desastre natural.
Las lluvias torrenciales del pasado fin de semana hicieron que los ríos se desbordaran inundando ciudades, cortando grandes ejes ruteros y forzando a miles de personas a huir de sus casas.
Selangor -el estado más poblado y rico de Malasia que rodea a la capital Kuala Lumpur- fue una de las áreas más afectadas, de acuerdo a los informes oficiales.
Las aguas empezaron a bajar lentamente y las autoridades indicaron que la reparación de una compuerta que controla el flujo de agua de un río cercano a la capital estatal Shah Alam acelerará ese proceso.
El país asiático, de unos 32 millones de habitantes, sufre inundaciones todos los años, pero las del fin de semana son las peores desde 2014, cuando 100.000 personas debieron dejar sus casas.