El dramaturgo Yunior García, uno de los principales promotores de la concentración opositora que se llevará a cabo en las próximas horas en Cuba, denunció presiones de parte de los agentes de seguridad del Estado; al tiempo que el presidente Miguel Díaz-Canel reiteró que la marcha es «ilegal».
El movimiento opositor Archipiélago convocó a la manifestación con el fin de exigir la liberación de los presos políticos, pese a que el gobierno la prohibió por considerar que se trata de un intento de desestabilización y acusó a los organizadores de estar financiados por Estados Unidos.
García, quien había anticipado que ayer marcharía solo y con una rosa blanca hacia el Malecón en rechazo a la medida del gobierno, denunció que su casa estaba «sitiada» por funcionarios «vestidos de civil, haciéndose pasar por pueblo».
«Hay carros en todas las esquinas y grupos debajo de mi edificio, al parecer ni siquiera eso están dispuestos a permitir», expresó el artista.
«Puedo estar detenido dentro de unas horas, lo enfrentaré con dignidad», expresó García, quien invitó a todos los cubanos a hacerse escuchar.
El Gobierno lo acusa de ser un agente financiado por Washington, lo señaló por asistir años atrás a un seminario en Madrid sobre el papel del Ejército en procesos de transición y reveló que recibió envíos de pequeñas cantidades de dinero desde el extranjero.
Estados Unidos, por su parte, instó a Cuba a permitir a la oposición manifestarse «sin miedo a represalias o violencia» y advirtió que permanecerá vigilante en las próximas horas, lo que deja abierta la adopción de nuevos castigos si hay «represión» y «violaciones de derechos humanos», dijo el secretario de Estado, Antony Blinken.
Además, la subsecretaria adjunta para las Américas del Departamento de Estado, Emily Mendrala, afirmó que Washington mantenía «contactos claves antes de las protestas» y promoverá «la rendición de cuentas de los violadores de los derechos humanos en caso de que sea necesario».
El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) también denunció «al menos un centenar» de «acciones represivas» en las últimas horas y acusó al gobierno de Díaz-Canel de buscar mediante la presión que la ciudadanía no se movilice.
La organización opositora aseguró que tenía registradas 29 citaciones policiales, 19 detenciones, 31 casos de vigilancia y 11 amenazas. Entre los detenidos figuran una moderadora de Archipiélago, Daniela Roja, y el destacado activista Guillermo Fariñas, premio Sájarov de la Eurocámara a la libertad de conciencia.
En paralelo, medios de prensa extranjeros denunciaron al Gobierno por violar la libertad de expresión al no permitirles trabajar.