El hombre, de nacionalidad egipcia, había pedido una audiencia con el Sumo Pontífice, la cual uno de los encargados del lugar le negó, por lo que el turista se enojó rápidamente y comenzó a golpear todo a su alrededor.
“Es un gesto de una persona trastornada”, afirmó el vocero de prensa del Vaticano, Matteo Bruni.
Luego de los hechos, los guardias de seguridad del Museo Vaticano lograron reducir al turista, a quien se le puede ver en una fotografía publicada en Instagram por Erik Walters, otro guía turístico que se encontraba en ese mismo sitio.
“El tipo arrodillado de la izquierda en una de las galerías de los Museos Vaticanos derribó dos bustos romanos de mármol de 2.000 años de antigüedad. Una imagen vale más que mil palabras”, mencionó la publicación.
Hay poca claridad sobre los métodos del turista para arrancar los bustos que se encontraban en ese lugar, pues en teoría, estos están anclados a las vitrinas, pero las estatuas, que datan de más de 2000 años de antigüedad, fueron a parar al suelo.
Según los restauradores del Museo del Vaticano, las esculturas romanas se hallaban sobre una repisa y no tuvieron daños relevantes. También confirmaron que ambas piezas ya fueron enviadas al laboratorio de restauración.
De acuerdo con el diario ‘ABC’ de España, las esculturas hacen parte de la exposición en el Museo Chiaramonti y se encuentra en la galería que hace conexión con el Palacete Belverde.
El turista egipcio, luego de ser reducido por la seguridad del lugar, fue entregado a las autoridades italianas, quienes están a la espera de empezar la respectiva investigación.