Más de 150 migrantes haitianos llegaron cerca de una exclusiva zona de recreo de Cayo Largo, en el sur de Florida, en Estados Unidos, a bordo de un barco de medianas dimensiones que se encalló por la poca profundidad del mar en la zona, según las autoridades.
«Las tripulaciones están respondiendo a una supuesta aventura migratoria frente a #OceanReef. El barco está encallado con #CoastGuard y equipos de rescate de agencias asociadas en la escena», informó en Twitter la Guardia Costera del séptimo distrito estadounidense.
Adam Linhardt, el portavoz de la Oficina del Alguacil del condado de Monroe, informó que entre 150 y 200 personas permanecían a bordo del barco cuando se detuvo en las aguas poco profundas de Ocean Reef Club.
El área de Ocean Reef Club, una marina privada con campo de golf, se convirtió en un lugar común para que grandes grupos de inmigrantes haitianos lleguen al sur de la Florida.
De hecho, 24 horas antes, la Guardia Costera de Estados Unidos interceptó un «velero haitiano» en Anguilla Cay, un islote perteneciente a las Bahamas, con 127 personas a bordo que realizaban «un viaje inseguro», según las autoridades.
Una historia repetida
En enero pasado, la misma entidad federal interceptó cerca de los Cayos de Florida otra embarcación que navegaba sobrecargada con 176 haitianos a bordo, diez de los cuales tuvieron que ser hospitalizados por presentar síntomas de deshidratación.
Desde el pasado 1 de octubre de 2021 (inicio del año fiscal 2022), las cuadrillas de la Guardia Costera interceptaron a 993 haitianos, en comparación con los 1.527 registrados en el año fiscal de 2021.
«El aumento de las patrullas está deteniendo estos viajes inseguros antes de que se pierdan vidas en el mar», escribió en la red social el séptimo distrito de la entidad federal del sureste estadounidense.
Pero más allá de los números, esta es una historia que se repite y que no deja de ser un gran peligro para los migrantes que dejan su país en búsqueda de una mejor vida en suelo estadounidense.
