Si bien las acciones en Nueva York coronaron ayer una jornada con resultados dispares, con el Nasdaq -0,24%, a causa de una corrección en los valores, pero con el Dow Jones (+0,26%) y el S&P 500 (+0,16%), hoy abrió en alza luego de la aprobación del proyecto de ley para suspender el techo de endeudamiento y evitar que el país incurra en una suspensión de pagos de la deuda nacional el 18 de octubre.
Esto se dio en una semana en la que el pasado martes el índice tecnológico vivía su jornada más bajista desde marzo.
Además, en la sesión de ayer la rentabilidad de los bonos estadounidenses a diez años regresaba a la palestra y, tras un breve descanso por la mañana, volvía a superar el 1,5%, en 1,54%.
Pero hoy los números mejoraron: el Dow Jones sube 0,42% y se coloca en los 34.533,65 puntos, el S&P 500 se anota un 0,43% sobre los 4.378,09 y el Nasdaq repunta un 0,51% hasta los 14.586,90. Dentro del S&P 500, las mayores subidas en la apertura son para Merck & Co (1,08%), Apple (0,95) y Visa (0,89%).
Los bonos siguen siendo fundamentales. Hoy recuperan algunas posiciones, pero nada del otro mundo y de momento, la rentabilidad del bono americano a 10 años está en el 1,53%.
La votación en la Cámara de Representantes para el proyecto de ley que mantiene a flote a Estados Unidos finalizó con 220 a favor y 210 en contra.
En las bolsas asiáticas destaca el repunte del índice chino Shanghai Composite chino de un 0,96% en la jornada previa a la festividad nacional.
Según la Oficina Nacional de Estadísticas de China, en septiembre la actividad manufacturera se contrajo por primera vez desde que comenzó la pandemia. En concreto, el PMI manufacturero cayó hasta 49,6 puntos (frente a 50,1 puntos el mes anterior).
En contraste, el indicador no manufacturero, que mide la actividad en los sectores de construcción y servicios, aumentó a 53,2 puntos, superando significativamente la previsión de consenso del mercado (49,8).
Además, Evergrande incurrió en «default» por segunda vez en una semana. Tiene, además, un nuevo vencimiento de 180 millones de dólares en octubre.
En agosto, la producción industrial de Japón se redujo un 3,2% respecto al mes anterior, 1,7 pp más que en julio (-1,5% mensual).
En Europa, las bolsas reaccionaron positivamente a mejores datos económicos y les dieron la bienvenida a los primeros acuerdos políticos para la formación del nuevo gobierno alemán tras los 16 años de Angela Merkel en el poder.
El sentimiento económico de la UE mejoró en septiembre después de caer en agosto, ya que aumentó el optimismo entre los consumidores y los sectores industrial y de la construcción, según revelaron hoy nuevos datos oficiales.
El índice de sentimiento económico de la Comisión Europea llegó a 117,8 en septiembre desde 117,6 en agosto, tras un récord de 119 en julio.
En el índice Euro Stoxx 50 que ganó 0,5% se destacaron el grupo comunitario Airbus +3,5%, la automotriz alemana Volkswagen +3,4% y el grupo financiero neerlandes ING +2,7%.
En Londres, el FTSE creció 1,1% mientras que el DAX 40 de Frankfurt y el CAC 40 de París avanzaron 0,8%; en Madrid, el IBEX 35 subió 1,3%; mientras que el MIB de Milán trepó 0,6%.
Por otro lado, los precios del petróleo siguen en baja: el Brent cae en estos momentos un 1,36% hasta el nivel de 77,03 dólares por barril, mientras que el WTI se sitúa ligeramente por encima del umbral de 73,61 dólares por barril, cediendo un 1,56%.
En el mercado de las criptomonedas, el precio del bitcoin sube un 3,23% hasta los 43.399,3 dólares.
En relación con todo esto, Jerome Powell, presidente de la Fed, dijo que: “Los cuellos de botella están provocando que la inflación se mantenga más de lo esperado. El aumento actual de la inflación es el resultado de restricciones de oferta que satisfacen una demanda muy alta», precisó.
«A medida que la economía se reabra, el aumento de la inflación se resolverá. No vemos ningún indicio de que el actual aumento de la inflación esté teniendo un efecto sobre las expectativas. Es muy difícil decir cuánto tiempo durará la inflación más alta, pero esperamos superarlo», agregó.
Powell, por último, afirmó: «Si la inflación se mantuvo demasiado alta durante demasiado tiempo, la Fed respondería. Los aumentos de precios se deben principalmente a la reapertura. Los ataques cibernéticos, las preocupaciones estructurales del mercado y el cambio climático representan las mayores amenazas para la estabilidad», concluyó.