Combustible-Mexico

Cada vez más estadounidenses cruzan a Tijuana para cargar combustible

Los estadounidenses que viven en California y alrededores cruzan a Tijuana para cargar gasolina porque llenar el tanque cuesta hasta tres veces menos, a partir del aumento del combustible en el mundo, debido a la guerra entre Ucrania y Rusia, que comenzó el 24 de febrero.

«Para ahorrar, carga antes de cruzar», el mensaje, acompañado del símbolo del dólar, el dibujo de una manguera surtidora y la bandera estadounidense es ubicuo en las gasolineras de Tijuana, en el norte de México.

Pero hay otros: «¡Aquí es! Más barato que en USA. Servicio y calidad», reza otro anuncio en suelo mexicano.

Y un tercero: «Tu aliada para ahorrar en ambos lados», dice el cartel de una gasolinera de la cadena Rendichicas, ubidaca en la calle Segunda, en la Zona Centro de Tijuana.

En un principio esto iba dirigido a los mexicanos que cada día acuden al otro lado de la frontera, a la ciudad californiana de San Diego o alrededores, a trabajar, pero cada vez son más los estadounidenses que hacen el viaje al sur exclusivamente por el precio de la gasolina.

«Yo cruzo precisamente a llenar el tanque de combustible», señaló en diálogo con BBC Mundo Jason Wells, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de San Ysidro, California, quien vive en el sur de San Diego, a apenas unos kilómetros de la línea que divide México de Estados Unidos.

«El depósito lleno en Tijuana me cuesta unos US$40, mientras que en San Diego pago más de US$120», agregó.

Precios récord en California, subsidios en México

Hace meses que en Estados Unidos, el precio de la gasolina -como en muchas partes del mundo- no deja de subir. De hecho, en poco más de un año, aumentó en un 40%, según datos del Departamento de Trabajo estadounidense.

El inicio de la invasión de Rusia -el tercer mayor productor mundial de crudo- a Ucrania hace algo más de un mes hizo que el precio se disparara. Y desde entonces rompe récords.

El costo promedio nacional de un galón (3,78 litros) alcanzó este mes los US$4,33, el máximo en 14 años, de acuerdo a datos de la Asociación Estadounidense del Automóvil (AAA, por sus siglas en inglés).

La cifra palidece al compararla con el precio en California, que, por una combinación de impuestos elevados y leyes ambientales, es el más alto del país: US$5,91 por galón frente al precio promedio nacional de US$4,24.

Pero en México, la historia es completamente diferente: el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se comprometió a mantener los precios bajo control con la concesión de subsidios al sector.

Desde marzo, renunció a cobrar el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios (IEPS) -el gravamen que se paga por la producción y venta o importación de gasolinas- y la Secretaría de Hacienda autorizó un estímulo fiscal adicional.

«El Estado no debe descuidar su responsabilidad social, y está aquí para proteger a la gente. No se trata de dejar todo en manos del mercado», aseguró AMLO a mediados de mes durante una conferencia de prensa.

Boom en Tijuana: aumento de clientela

«Yo lo que sé es que en México del 3 de enero a inicios de la semana pasada la gasolina regular aumentó un peso y 35 centavos el galón, lo que viene a ser unos US$0,10 centavos de dólar», señaló en diálogo con BBC Mundo Alejandro Borja Robles, quien agregó: «En California en una semana ya subió hasta US$0,70».

Robles es el presidente del Grupo Especializado de Gasolineros de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en Tijuana. Y las 266 estaciones de servicio que su grupo representa lo notan en sus ventas.

«En algunas gasolineras ven el aumento entre las 3 y las 6 de la mañana. Es gente que vive en Tijuana y va al otro lado de la frontera para trabajar. Y ahora llena el tanque, no los 200 pesos justos para cruzar», aclaró.

«Pero los fines de semana suben las ventas de Premium (la de 91 octanos) y se ven más camionetas con placas de California. Es un panorama nuevo. Durante años fue a la inversa», precisó Robles.

No fue raro que los mexicanos que viven cerca de la frontera condujeran hacia el norte para llenar sus tanques. La tendencia alcanzó mayor expresión en 2017, con el aumento de precios que siguió a la desregulación de la industria petrolera.

Cientos de mexicanos acudieron entonces a repostar a las estaciones de servicio de Caléxico, una ciudad californiana que linda con Mexicali, la ciudad más septentrional de México.

Aumento de las ventas del 6%

Patricia Saharagui, gerente de relaciones públicas de la cadena de gasolineras Rendichicas, calcula que sus locales cercanos a la frontera experimentaron en el último mes un aumento de las ventas del 6%.

Cuentan con 39 estaciones de servicio en el el estado de Baja California, 32 de ellas en Tijuana. .

Venden el galón de gasolina regular a un promedio de US$3,88 y la Premium a US$4,12. «El ahorro de comprar en Tijuana es considerable, hasta US$50-60 dependiendo del tipo de automóvil», manifestó en diálogo con BBC Mundo.

«Al punto de que hay californianos que cruzan específicamente para cargar el tanque de combustible. Ahora les sale a cuenta hacer una fila de tres horas en el paso fronterizo para entrar de regreso a Estados Unidos», añadió

«Esto es lo bueno de vivir en una región binacional», explicó Jason Wells, de la Cámara de Comercio de San Ysidro.

Se refiere a los ciudadanos de ambos lados que cada día cruzan la frontera, para trabajar, asistir a la escuela, visitar a la familia, ir al médico, de compras o a hacer turismo. Y ahora, para poner gasolina a sus vehículos.

«Para nosotros cruzar la frontera es como cruzar la calle. Aprovechamos lo mejor de cada lado, vivimos lo mejor de ambos mundos», concluyó.