Hepatitis

Argentina: se detectó el primer caso de hepatitis aguda grave

El niño rosarino de 8 años detectado con un cuadro de hepatitis aguda grave de origen desconocido «sigue en terapia, pero estable».

El Ministerio de Salud de Argentina confirmó que se detectó en la provincia de Santa Fe «un caso de hepatitis» en un niño de ocho años, el primero de este tipo en el país, pero que ya mantiene en alerta a la comunidad científica mundial porque hasta el momento se registraron 228 casos en 209 naciones.

«El Ministerio de Salud de la Nación informa que se detectó en el Hospital de Niños de zona norte de la ciudad de Rosario, Santa Fe, un cuadro de hepatitis aguda grave de origen desconocido en un paciente de 8 años», informó la cartera que encabeza la ministra Carla Vizzotti.

«El caso corresponde a un niño de 8 años que es atendido en el Hospital de Niños de zona norte de la ciudad de Rosario», precisó la información oficial, según consignó la agencia de noticias Télam.

Por su parte, la ministro de Salud de Santa Fe, Sonia Martorano, sostuvo: «Se detectó el caso en la ciudad de Rosario de un niño de 8 años con una hepatitis severa de causa aún no determinada. Está en proceso de investigación y estudio. Se han descartado las hepatitis A, B y C pero estamos esperando los resultados de D, E y otras causales que siempre estudiamos».

En tanto, la funcionaria afirmó que se descartaron «otros brotes en el núcleo familiar del niño», por lo que los médicos determinaron que se trata de «un caso aislado».

Martorano reveló que actualmente el menor «se encuentra en terapia y estable y se espera por la evolución del caso en las próximas horas».

En ese sentido, detalló que el equipo médico del Hospital de Niños de zona norte de la ciudad de Rosario, un centro de alta complejidad, está «trabajando junto al instituto Malbrán y que en las próximas horas enviarán allí muestras para que ellos también participen de la investigación de las causales; estamos trabajando de manera conjunta y coordinada».

La OMS y la OPS en alerta

El 15 de abril de 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un alerta sobre casos de hepatitis aguda grave de causa desconocida en niños en Reino Unido y desde entonces se notificaron más casos.

«No hablamos de casos confirmados porque actualmente la causa especifica es desconocida y bajo investigación. Los casos reportados se refieren a niños con una hepatitis aguda grave donde no se identificaron las hepatitis A, B, C, D o E.», indicó la OPS/OMS en su página oficial en un comunicado del 3 de mayo.

«Hasta el 1 de mayo, se han señalado a la OMS 228 casos en 209 países y otros 50 están investigándose», expresó el portavoz de la OMS, Tarik Jasarevic, a los periodistas en Ginebra, de acuerdo a la agencia de noticias AFP.

La mayoría de los casos se registran en Europa, sobre todo en Reino Unido, pero el origen de estas hepatitis sigue siendo un misterio.

La OMS precisó que el pasado 5 de abril fue informada de 10 casos de hepatitis aguda severa de origen desconocido en niños de menos de 10 años en el centro de Escocia, y tres días después ya se habían identificado 74 casos en Reino Unido.

Esta hepatitis produce ictericia, diarrea, vómitos y dolores abdominales; en algunos casos requirieron de un trasplante de hígado y al menos cuatro niños fallecieron.

Los virus comunes de la hepatitis no fueron registrados en ninguno de los casos, según el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) y la OMS.

Por el momento, una causa infecciosa parece ser «lo más probable», pero no se estableció ningún vínculo común con un alimento contaminado o tóxico que pueda ser identificado, informó la ECDC.

«La creciente alza del número de niños afectados por una súbita hepatitis es inusual y preocupante» manifestó Zania Stamataki, del Centro de Investigación sobre el Hígado y el Aparato Gastrointestinal de la Universidad de Birmingham.

Una hepatitis es una inflamación del hígado, como reacción a un virus, tóxicos o enfermedades autoinmunes o genéticas, su evolución suele ser benigna y sus principales síntomas -fiebres, diarreas, dolores abdominales- se resuelven rápidamente o son débiles y, a veces, aunque no es tan habitual, pueden provocar una insuficiencia renal.

El hecho de que algunas hepatitis afecten a niños de entre uno y cinco años sorprende a los especialistas así como la necesidad, en algunos casos, de trasplante.

Además, no fueron detectados en ninguno de los casos los habituales virus que originan la hepatitis viral aguda (de A a E), indicaron desde el ECDC y la OMS.

Un análisis de estos misteriosos casos de hepatitis en Estados Unidos llevó a las autoridades sanitarias del país a pensar que su origen podría ser un patógeno común llamado adenovirus 41, aunque por ahora esto sigue siendo una hipótesis.

En tanto, entre las posibles pistas, los adenovirus fueron detectados en al menos 74 niños, de los cuales 18 adenovirus del llamado «tipo 41».

«Los adenovirus son virus banales y bastantes conocidos, que provocan generalmente síntomas respiratorios (bronquitis, faringitis, etc), oculares (conjuntivitis) o problemas digestivos (gastroenteritis) y la mayoría de los humanos son infectados por estos virus antes de los cinco años», explicaron.

Varios países, entre ellos Irlanda y los Países Bajos, informaron de una creciente circulación de estos adenovirus.

Sin embargo, su «papel» en el desarrollo de las hepatitis no está claro y el adenovirus 41 «no es conocido como una causa de hepatitis entre los niños con buena salud», observó la OMS.

Entre las hipótesis figura la posibilidad de una relación con el coronavirus, detectada en 20 niños, mientas que otros 19 mostraron una coinfección de covid y adenovirus», advirtieron.

Si esas hepatitis estuvieran causadas por el coronavirus sería muy sorprendente que no fueran mucho más numerosas dada la fuerte circulación del Sars-Cov2″, destacó Graham Cooke, especialista de enfermedades infecciosas del Imperial College de Londres.

En tanto, su relación con las vacunas para el coronavirus ya fue descartado: «la gran mayoría de los niños afectados no estaban vacunados», concluyó la OMS

Por su parte, Enrique Pérez, gerente de Incidente para covid-19 y jefe de Información sobre Emergencias Sanitarias y Evaluación de Riesgos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), aseguró: «Hasta el momento hay 228 casos probables que fueron notificados por 20 países, principalmente de la región de Europa, pero también de las Américas, del Pacífico Occidental y del Sudeste Asiático», detalló.

Asimismo, Pérez informó que «19 de estos niños han sido sometidos a trasplante de hígado y uno falleció».

Según agencias internacionales, el Ministerio de Sanidad de Indonesia informó el lunes pasado que tuvo otros tres niños fallecidos por casos de hepatitis aguda de origen desconocido.

Voz de una experta

Por su parte, la médica infectóloga argentina Leda Guzzi, opinó que «se trata de cuadros de inflamación hepática aguda que se presentan en niños y niñas de hasta 16 años cuya causa aún se desconoce».

Sin embargo, manifestó que «existen un par de hipótesis en torno a que podría tratarse de una infección gatillada por un adenovirus, concretamente por el subtipo F41, que es un virus que normalmente da un cuadro banal gastrointestinal y que solo muy ocasionalmente puede dar cuadros de hepatitis grave en personas con inmunodepresión severa».

La especialista consideró que «otra hipótesis gira en torno a la posibilidad de que se trate de una manifestación inflamatoria post covid, como las que producen el síndrome inflamatorio multisistémico que está bien descripto en niños y niñas y que es bastante infrecuente también».

«En este caso no se trataría de la acción directa del virus, sino que es el sistema inmune desregulado el que genera el cuadro de inflamación multisistémica eventualmente hepática; se estudian además otras causas que puedan tener que ver con un origen tóxico o infeccioso», aseveró.

Guzzi destacó que «es importante enfatizar que no hay ninguna vinculación con la vacuna anticovid; de hecho según las primeras notificaciones ninguno de estos niños y niñas estaban vacunados para SARS-Cov-2».

En relación a los síntomas, la especialista describió que «la mayoría de los reportes relatan cuadros de gastroenteritis, es decir dolor abdominal, diarrea y vómitos que preceden el advenimiento de la ictericia, es decir al color amarillento de piel y mucosas; las hepatitis suelen manifestarse con ictericia, emisión de orina oscuras y materia fecal clara, y ocasionalmente fiebre».

«Al desconocerse el origen (etiología) tampoco se sabe si se trata de una enfermedad infectocontagiosa, por lo que las medidas preventivas por ahora son universales y tienen que ver con la higiene de la tos y el lavado de manos», puntualizó.

Y añadió que «es importante no entrar en pánico» ya que estos cuadros se están estudiando en todo el mundo y constituyen «una prioridad extrema para el mundo científico y la OMS».

En este contexto, Guzzi señaló que «hay que esperar el surgimiento de información de fuentes oficiales y mientras tanto continuar con los cuidados recomendados, es decir el uso del barbijo en los interiores, la ventilación constante y cruzada, el aislamiento inmediato si uno presenta cualquier sintomatología, el lavado de manos y por supuesto completar el calendario de vacunación anticovid».