Chile adjudicó explotación de litio a la china BYD y a una firma local

El Gobierno de Chile anunció que la compañía china BYD y la local Servicio y Operaciones Mineras del Norte se adjudicaron una licitación para explotar 160.000 toneladas de litio, una operación resistida por gran parte de la oposición y que ocurre dos meses antes de la asunción del presidente electo, Gabriel Boric, quien ya anticipó que va a «revisar» la decisión.

«El Gobierno de Chile notificó la adjudicación del proceso de licitación para impulsar la producción de litio en el país a las empresas BYD (China) y Servicio y Operaciones Mineras del Norte (Chile)», informó el Ministerio de Minería a través de un comunicado.

«Cada una de las empresas se adjudicó una cuota de 80.000 toneladas de litio -que representa al 1,8% de las reservas conocidas en Chile- y a cambio Chile recibirá 121 millones de dólares en pagos por ambas licitaciones», agregó la cartera.

Los representantes BYD ofrecieron US$ 61 millones, mientras que los de Servicios y Operaciones Mineras del Norte S.A. US$ 60 millones.

Cada empresa contará con un plazo de siete años para hacer la exploración geológica, los estudios y el desarrollo del proyecto.

El Gobierno de Chile explicó que antes de la etapa de explotación las compañías deberán obtener todos los permisos ambientales requeridos y deberán entregar información y conocer las inquietudes de las comunidades en donde se emplazarán las industrias.

De esta manera, la licitación dejó por fuera a las dos principales productoras mundial del litio, Albemarle y la chilena SQM.

 

Polémica y «revisión»

La licitación generó polémica por haberse realizado dos meses antes de que termine el mandato del conservador Sebastián Piñera y a menos de un mes del balotaje que proclamó al candidato de izquierda Boric como presidente electo.

Lea también: Boric se convirtió en el nuevo presidente de Chile

 

Hace una semana, Piñera ratificó su posición sobre las negociaciones en torno a la industria del litio.

«Éramos el primer país del mundo en producirlo y hoy no lo somos. Decidimos poner en marcha un plan de aprovechamiento del litio que es el mineral esencial para el mundo que se viene», enfatizó el presidente chileno saliente en una rueda de prensa.

Tras reunirse con gobernadores regionales en Santiago, Boric tildó de «mala noticia» el anuncio del Ministerio de Minería, y dio por seguro que sus equipos revisarán la medida.

«Esta era una atribución exclusiva del gobierno en ejercicio y nos parece que es una mala noticia. Me recuerda a esas leyes de amarre que se hacían a última hora», advirtió el futuro jefe de Estado.

Y agregó: «Es algo que vamos a revisar por cierto con nuestros equipos y mantenemos nuestra disposición para la creación de una empresa nacional del litio, que además actúe en consideración con las comunidades, con el cuidado de los salares y el desarrollo productivo nacional».

«Lamento que el Ejecutivo avanzara aunque su fuerza había pedido que «no innovaran en la materia y que, por lo tanto, permitieran tener un debate de largo aliento respecto a un bien tan estratégico como el litio», subrayó.

Por último, Boric aseguró: «Tenemos que dejar que las instituciones funcionen; nosotros vamos a evaluarlo con todas las herramientas que tengamos a disposición desde el 11 de marzo, que es que cuando vamos a empezar a ejercer nuestras facultades», concluyó.

 

Otra mirada para un mismo tema

En lugar de estas licitaciones, Boric propuso en su programa de Gobierno crear una empresa nacional del litio y convertir el mineral en un recurso estratégico para el país.

Lea también: Argentina, Bolivia y Chile acaparan inversiones globales del litio

 

Los asesores y miembros del equipo del presidente electo se reunieron en privado la semana pasada con el ministro de Minería, Juan Carlos Jobet, para que no avanzara en las negociaciones y dejara desierta esta licitación, lo que finalmente no sucedió.

La cartera de Minería alegó que se atendieron los pedidos del equipo de Boric y por eso, por ejemplo, se rebajó de cinco a dos las cuotas de explotación que se ofrecieron y se entregarán parte de los recursos a las comunidades locales y a la investigación.

«Si ya tomaron la decisión, tienen la atribución para hacerlo… Pero me parece que es una mala decisión y la vamos a revisar en su momento con nuestros colaboradores», reiteró el mandatario electo.

La decisión del Gobierno tuvo también su rebote en la Cámara de Diputados, que declaró admisibles los proyectos que buscan frenar la venta de parte de las reservas.

La iniciativa fue presentada por la Democracia Cristiana (DC), el Partido Socialista (PS), el Partido Comunista (PC) y la Federación Regionalista Verde Social (FRVS) y apuntó a que el actual Gobierno no concrete la venta de parte de la reserva del metal a entes extranjeros.

 

Escándalo en el Congreso

Ante esta situación, la oposición se retiró de la sesión especial de la Cámara de Diputados en la que iba a analizarse el proceso con la presencia del ministro Jobet.

«Es una falta de respeto y un ninguneo a un poder del Estado que el Gobierno, una hora antes de la sesión especial en la que estamos llamados a debatir esta materia y tomar acuerdos relevantes para el país, haya adjudicado a dos empresas privadas la explotación del litio por 30 años», explicó el diputado Raúl Soto, del Partido por la Democracia.

Al retirarse de la sala, el legislador dejó en claro que intentarán «por todos los medios» frenar este proceso, apuntando a los tribunales de justicia y la Contraloría.

Jobet insistió en que se habían atendido los pedidos opositores y lamentó que las bancadas antigubernamentales dejaran el recinto. «Estas son las cosas que alejan a las personas de la política», puntualizó.

«La licitación que hemos anunciado recoge todas las solicitudes y aprensiones que nos habían planteado respecto de este tema los representantes del equipo del presidente electo», afirmó el ministro.

De acuerdo con el Ministerio de Minería, hasta 2016 Chile era el mayor productor mundial de litio, con un 37% del mercado, pero hoy ocupa el segundo lugar -detrás de Australia- con un 32%. Si el país no logra aumentar su producción, al año 2030 su participación caería al 17%.