Un niño de 12 años murió y otras 12 personas resultaron heridas en un ataque con explosivos contra un puesto policial en la región de Arborizadora Alta, en Bogotá, según informó en Twitter el ministro de Defensa de Colombia, Diego Molano.
«Lamentamos el fallecimiento de un pequeño de 12 años anoche en el Hospital de Meissen. Nuestra solidaridad con sus padres y familiares. Este hecho deja un saldo parcial de 7 adultos y 5 menores de edad lesionados», tuiteó la Personería de Bogotá.
Según la Alcaldía de la capital colombiana, entre los heridos se cuenta un policía que está «fuera de peligro».
El menor falleció mientras era atendido en un hospital de Ciudad Bolívar, un barrio popular que, con este, fue objeto de dos ataques similares en el último mes.
En este último hecho, el explosivo fue «colocado en la parte posterior del puesto de policía, camuflado en una maleta que se activa cuando se hace una llamada», explicó el ministro de Defensa, Diego Molano, informó la agencia de noticias AFP.
«Se trata del mismo mecanismo usado en el ataque contra otro puesto policial de la zona el pasado 5 de marzo», denunció Molano.
Las autoridades, que no dijeron quién estuvo detrás del ataque o de quién sospechan, ofrecieron una recompensa de 80.000 dólares a quien pueda brindar información que lleve a la captura de los autores del hecho.
Rebrote de violencia
Colombia atraviesa por el peor rebrote de violencia tras firmar la paz con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarios de Colombia (FARC) en 2016, según un informe presentado la semana pasada por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
En 2020, el CICR registró 486 víctimas de artefactos explosivos, el 53% civiles, incluidos 40 menores de edad, y del total de afectados, 50 fallecieron, según el informe anual presentado por el organismo.
Son casi 100 víctimas más que las reportadas en 2020, cuando la cifra global fue de 392, hasta ese momento la más elevada, en 14 de los departamentos más castigados por un conflicto interno que persiste después del desarme de las FARC.
En varios puntos del país la seguridad se deterioró todavía más de cara a las elecciones presidenciales de finales de mayo.