Perú: Fujimori, otra vez internado

El expresidente de Perú, Alberto Fujimori, fue internado de urgencia tras sufrir un problema cardíaco en el penal donde cumple una pena de 25 años por su responsabilidad en dos masacres, mientras se inició el juicio a él y a tres exministros por la esterilización forzada de miles de mujeres durante su gobierno.

«Se ha descompensado a las 7 de la mañana y comenzó a hacer una fibrilación auricular con una tremenda arritmia, y obligó a llevarlo al centro de salud más cercano desde el penal policial de Barbadillo, donde cumple desde 2007 una sentencia de 25 años», infirmó su médico personal, Alejandro Aguinaga.

«Hizo un cuadro de asimilación auricular que no pudo compensarse. El ritmo cardíaco pasaba de 40 pulsaciones por minuto a 160», detalló.

Fujimori, de 83 años, fue «compensado en el hospital de Ate» y luego fue trasladado en una ambulancia a la clínica Centenario, en el distrito limeño de Pueblo Libre.

La internación y los motivos fueron confirmados por el Instituto Nacional Penitenciario (Inpe) y el Seguro Social de Salud (Essalud) en sendos comunicados.

Según Aguinaga, el exmandatario (1990-2000) sufre desde 2018 una fibrilación auricular por la que fue operado en octubre pasado.

 

Comenzó el juicio

Paralelamente, el Tribunal a cargo del juez Littman Ramírez inició el juicio a Fujimori y quienes fueran sus ministros de Salud, Eduardo Young, Marino Costa y el propio Aguinaga -que actualmente es legislador del Congreso unicameral- por el caso de las esterilizaciones forzadas, con la recepción de las primeras declaraciones testimoniales.

También está procesado Ulises Aguilar, exasesor del Ministerio de Salud en aquella época.

Los cinco están imputados como presuntos autores «de la comisión del delito contra la vida, el cuerpo y la salud, lesiones graves seguidas de muerte en un contexto grave de violación de derechos humanos», según consta en la resolución judicial que habilitó el juicio.

El Ministerio Público estableció que 2.091 mujeres fueron esterilizadas contra su voluntad entre 1996 y 2001, mientras la Defensoría del Pueblo calculó en más de 272.000 el total de víctimas de esa práctica.

En el proceso que comenzó se darán a conocer los casos de más de 1.500 víctimas, según fuentes oficiales.

Fujimori cumple una sentencia de 25 años de cárcel por las matanzas de Barrios Altos (1991) y La Cantuta (1992), donde un escuadrón de la muerte del ejército asesinó a 25 personas -un niño, entre ellas- en una supuesta operación antiterrorista cuando era mandatario.

El exmandatario, quien padece recurrentemente problemas respiratorios y neurológicos (parálisis facial) e hipertensión, recibió también otras condenas menores en procesos por corrupción, pero la legislación peruana establece que si una persona es sentenciada a más de una pena de cárcel debe cumplir únicamente la más extensa.

El juicio por las esterilizaciones forzadas se realiza más de una década después de todos los demás procesos a Fujimori porque, al no estar incluido en las condiciones por las cuales fue extraditado en 2007 desde Chile, fue necesario gestionar la autorización de este país.