El desarrollo del sector forestal va de la mano con un objetivo nacional: colaborar con las metas mundiales para luchar contra el cambio climático global.
El ministro de Economía y Finanzas, Pedro Francke, destacó que Perú «tiene potencial para captar financiamiento internacional» para el desarrollo del país «a través de la emisión de bonos de carbono».
«Perú tiene potencial para captar financiamiento a través de bonos de carbono. Creo que es una cosa mixta y también uno puede pensar en iniciativas de preservación de bosques con otros objetivos», explicó Francke, quien antes de sumarse al Gobierno de Pedro Castillo trabajó en el Banco Mundial.
«Entonces, creo que es un sector que tiene una potencialidad amplia y diversa, es distinto aprovechar los bosques existentes con su diversidad, que plantearse una alternativa de deforestación», agregó el funcionario de 60 años.
El sector forestal del país no solo tiene por un lado la posibilidad de engancharse a cadenas de valor para la transformación de la madera en muebles y otros productos, sino que además contribuye a la preservación del clima mundial con la captura de los gases de efecto invernadero.
En tal sentido, Francke, un economista académico, señaló que el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) impulsará la mesa ejecutiva entre el sector privado y el público para resolver los temas que limitan el desarrollo en ese ámbito.
El ministro calificó como «positivas» las reuniones que tuvo con inversores extranjeros en su reciente gira por México y Estados Unidos.
«Creo que las reuniones han servido para despejar sus dudas sobre el escenario político que a algunos les preocupaba. Los propios inversionistas quieren apoyar en eso. Por eso creo que Perú ahí tiene grandes oportunidades en reforestación, energías renovables, infraestructura verde», enumeró Francke.
«Hay unas oportunidades muy importantes que tiene el país, porque puede ser beneficioso para las mypes, poblaciones y la economía», subrayó.
El ministro además consideró que hay otros sectores «como el acuícola» que también tiene «mucho potencial para desarrollarse en el país».
«Vamos a hacer un esfuerzo grande para que estas mesas (ejecutivas) que tenemos ahora vayan aterrizando, replicándose, relacionándose con los gobiernos y realidades regionales para que tengan mucha más tracción, mayor potencialidad de desarrollo», concluyó.
La economía peruana se vio paralizada por una larga cuarentena en 2020 que hizo que el PBI se desplomara 11,1%, pero no logró frenar el coronavirus. El FMI prevé que el crecimiento este año repunte un 8,5% y las proyecciones de Francke al Congreso muestran que el déficit presupuestario bajará de más del 8% el año pasado a alrededor del 4,7% este año.
