La UE revisa recomendaciones sobre viajes internos ante el aumento de casos de Covid-19

El organismo lo hace a partir de la cuarta ola de la pandemia que tiene en vilo a toda Europa.

Las autoridades de los países europeos, con el repunte de la cuarta ola de la pandemia de coronavirus, restablecieron medidas restrictivas, llamaron a vacunarse y mantuvieron el uso obligatorio de pases sanitarios para acudir a lugares de ocio, mientras la Unión Europea (UE) prevé modificar sus recomendaciones en relación con la libre circulación dentro del bloque comunitario.

«En las últimas semanas hemos trabajado con los países miembros y expertos para actualizar las recomendaciones relativas al movimiento. Haremos nuestras propuestas en los próximos días», comunicó la vocera de la Comisión Europea, Dana Spinant, quien no dio precisiones.

Desde el 1 de julio de 2021, la UE utiliza certificados digitales de vacunación, que confirman que la persona obtuvo resultado negativo en la prueba PCR, padeció la enfermedad recientemente o recibió la pauta completa contra el virus. Sin embargo, hoy Europa vuelve a ser epicentro de la pandemia.

Ante esta situación, el miércoles pasado, el primer ministro de Grecia, Kiriakos Mitsotakis, propuso a la Comisión Europea que el certificado de circulación sea considerado vigente solo si, al pasar seis meses desde la primera dosis, incluye la tercera inyección.

Debido al acelerado aumento de los contagios, volvieron las restricciones y con ellas, las frustraciones y rabia de la gente que en las últimas semanas salió a manifestarse contra las medidas en varias ciudades europeas.

Austria, por ejemplo, entró oficialmente en confinamiento hasta el 13 de diciembre próximo, una medida radical que desató protestas el fin de semana. Solo el 66% de la población recibió las dos dosis. Además, dispuso la obligatoriedad de la vacunación para la población adulta desde el 1 de febrero de 2022, algo que muy pocos países han instaurado hasta ahora.

Lo mismo sucedió en Bélgica y Países Bajos, o en Guadalupe, departamento francés de las Antillas, donde la vuelta de las restricciones generó protestas violentas contra la exigencia del pase sanitario y la vacunación obligatoria del personal médico.

En Bélgica, el primer ministro Alexander De Croo, denunció una violencia «absolutamente inaceptable», un día después de una manifestación en Bruselas donde miles de personas (35.000, según la policía) se congregaron en contra de las restricciones anti Covid que terminó con tres policías heridos y 40 personas detenidas.

En un contexto de fuerte aumento de las infecciones y las hospitalizaciones, Bélgica anunció la generalización del uso de tapabocas y quiere hacer obligatorio el teletrabajo en los sectores que lo permitan.

En tanto, Países Bajos vivió su tercera noche seguida de protestas, con fuegos artificiales y vandalismo en las ciudades de Groningen, Leeuwarden, Enschede y Tilburg.

El primer ministro neerlandés, Mark Rutte, calificó estos actos de «pura violencia», cometidos por «idiotas».

En paralelo, Alemania, vive una nueva ola de infecciones, que los expertos y los políticos atribuyen a una de las tasas de vacunación más bajas de Europa Occidental.

Con apenas el 70,5% de la población vacunada y el 68% con la pauta completa, se abrió el debate sobre la obligación de las vacunas.

Al respecto, el ministro de Salud alemán, Jens Spahn, instó a sus compatriotas a vacunarse «urgentemente» y alertó que «seguramente al final del invierno cada cual estará vacunado, curado o muerto, debido a la propagación de la variante Delta, muy pero muy peligrosa».

Ante la «dramática situación» provocada por el brote de infecciones, la canciller saliente de Alemania, Angela Merkel, advirtió que las actuales restricciones en el país «ya no son suficientes».

Tanto Merkel como su probable sucesor, Olaf Scholz, ya decidieron la semana pasada endurecer las restricciones para las personas no vacunadas.

Por su parte, Rusia registró 35.681 nuevos positivos de coronavirus y 1.241 muertes asociadas en la última jornada, según el centro operativo nacional para la lucha contra la pandemia, unas cifras levemente más bajas a las del día anterior cuando se registraron 36.970 casos y 1.252 decesos asociados.

El número acumulado, 9.366.839 contagios, supone un incremento del 0,38% con respecto al día anterior.