La empresa estadounidense Tesla -que diseña, fabrica y vende automóviles eléctricos- superó las expectativas de los mercados y alcanzó cifras récords en el primer trimestre de 2022 con beneficios netos de 3.318 millones de dólares, un 658 % más que hace un año, gracias al aumento de las entregas de vehículos y el abaratamiento de sus costos de producción.
El fabricante de automóviles eléctricos informó que los tres primeros meses del año representan «un trimestre con cifras récord en términos de ingresos, entregas de vehículos y beneficios operativos», y añadió que la compañía sigue «concentrada en crecer tan rápido como sea razonablemente posible».
La compañía, propiedad del magnate sudafricano Elon Musk, el hombre más rico del mundo, reveló que el aumento de los beneficios «se debió al crecimiento de la entrega de vehículos, la reducción de los costos por vehículo a pesar de la inflación y el aumento de la venta de los créditos de emisiones que recibe por la producción de automóviles eléctricos».
Los ingresos procedentes del automóvil aumentaron en el trimestre un 87 %, a 16.861 millones de dólares, y el margen operativo se situó en 19,2 %.
La cifra de ingresos incluye la venta de créditos de emisiones por valor de 679 millones de dólares, un 31 % más que en 2021.
Además a Tesla ingresaron 616 millones de dólares por generación y almacenamiento de energía y 1.279 millones de dólares por servicios y otros conceptos.
En total, los ingresos de la compañía automotriz crecieron un 81 %, hasta los 18.756 millones de dólares.
El resultado bruto de explotación ajustado fue de 5.023 millones de dólares, un 173 % más que en el mismo período de 2021, y el margen ascendió al 26,8 %.
Musk garantizó que Tesla crecerá aún más este año
Durante una conferencia telefónica con analistas y medios de comunicación tras la publicación de los resultados, Elon Musk sostuvo que la compañía «crecerá de forma significativa este año y que producirá 1,5 millones de vehículos».
En 2021, Tesla produjo 930.422 vehículos y entregó 936.172, un 87 % más que el año anterior.
En el primer trimestre, la empresa repartió un total de 310.048 vehículos, un 68 % más que en el mismo período de 2021; en tanto que la producción de la compañía se elevó a 305.407, un aumento del 69 %.
De los vehículos entregados, 295.324 unidades eran de Model 3 y Model Y; mientras que el resto, un total de 14.724, eran de Model S y Model X.
Este año, además de sus plantas de Fremont (California, Estados Unidos) y Shanghái (China), Tesla tendrá en pleno funcionamiento instalaciones en Texas (Estados Unidos) y Berlín (Alemania).
Musk afirmó que a pesar de los problemas de la planta de montaje de Tesla en Shanghái debido al brote de covid-19 que afecta la ciudad china, la compañía «será capaz de producir 1,5 millones de coches este año».
En documentos para accionistas y analistas, Tesla indicó que sus plantas de montaje tienen capacidad para aumentar su producción porque funcionaron «por debajo de su capacidad desde hace varios trimestres, debido a los problemas de suministro que afectan a todo el sector».
Musk reconoció durante la conferencia telefónica que el desarrollo de la tecnología de conducción autónoma de Tesla está «más lenta de lo que él había previsto», pero además señaló que quiere que para 2024 la compañía «produzca de forma comercial un robotaxi» que funcionaría con conducción autónoma y adelantó que en 2023 «organizará un evento sobre este vehículo».
El empresario también animó a los propietarios de coches de Tesla a que se suscriban al programa beta de FSD (Full Self-Driving). Hace dos días, Musk aseguró que el programa ya tenía unos 100.000 suscriptores.
Tesla registró ganancias récord una vez más, dejando atrás los problemas de la cadena de suministro que persiguieron a la industria automotriz en general, y superó el pronóstico de Wall Street para la compañía para el primer trimestre de 2022.