La cifra representa una caída de 2,1 puntos porcentuales, en la taza de desempleo, al compararla con igual mes de 2021.
La tasa de desempleo en marzo bajó a 9,2% en el Gran Santiago, lo que representa una caída de 2,1 puntos porcentuales (pp.) respecto de la observada en el mismo mes del año anterior, pero un incremento de en 0.9 pp. al comprarla con el dato de diciembre de 2021, de acuerdo al Centro de Microdatos de la Universidad de Chile.
Esta tasa de desempleo equivale a 320.000 personas desocupadas en el Gran Santiago y significa una disminución de 12,8% en doce meses.
En ese sentido, la variación anual del desempleo se debe, principalmente, al crecimiento de 7,3% de la fuerza de trabajo y de 9,8% del empleo total.
Lorena Flores, la directora ejecutiva del Centro de Microdatos, sostuvo: «Se crean en el año 284.000 empleos, y en el trimestre se destruyen 44.000».
«Pero hay que tener mucho cuidado con la comparación, sobre todo diciembre-marzo, porque hay mucha estacionalidad en las cifras de empleo, y marzo y junio son particularmente meses malos, donde normalmente baja la velocidad del mercado laboral y eso es lo que estamos viendo aquí», continuó.
Y completó: «Pero respecto del año anterior, hay un crecimiento del empleo de 284.000, y eso quiere decir que hay una reacción positiva de 9,8% en doce meses», destacó Flores.
Más hombres jóvenes desempleados
La encuesta mostró que la tasa de desempleo masculina es de 9,6%, mientras que la femenina es de 8,6%.
En tanto, quienes presentan mayor desempleo son los jóvenes de 14 a 24 años (22,7%), seguidos por quienes tienen 55 años y más (8,3%), y el menor desempleo es en el rango etario de 25 a 54 años (7,9%).
Por otro lado, la tasa de ocupación ascendió a 53,7%, aumentando en 4,1 pp. respecto al año pasado, pero disminuyó 0,9 pp. comparada con diciembre de 2021.
El relación a este tema, Flores manifestó: «Se ve un aumento en el año de 4,1 pp. en los ocupados, lo que es positivo; una disminución de 0,9 puntos porcentuales en los desocupados; y a la vez de 3,2 pp. en los inactivos. Nuevamente estamos viendo movimientos deseables para la recuperación del mercado laboral en el año», valoró.
No obstante, la tasa de ocupación femenina es similar a la de 2014, en cambio la masculina retrocedió al nivel de 2003.
Con esto, el número de personas ocupadas en Gran Santiago equivale a 3.167.000 personas.
Los números por sectores
Los sectores productivos que exhiben alzas del empleo son Transporte y otros (34,6%), Servicios de Gobierno y financieros (18,2%), Servicios personales y de los hogares (12,6%), Industria manufacturera (10,5%), Comercio (8,4%), mientras que el empleo cayó en Construcción (8,6%) y en Servicios comunales y sociales (3,6%).
La tasa de participación fue de 59,2% en el tercer mes del año, 3,3 pp. más alta que hace un año.
El desglose por género indica alzas anuales tanto en la participación laboral de las mujeres (3,4 pp.) como de los hombres (3,1 pp.).
En cuanto a los desocupados, el 90,9% corresponde a cesantes, es decir, personas que trabajaron previamente de forma remunerada.
En doce meses, las personas desocupadas disminuyeron 13%, mientras las personas con empleo asalariado aumentaron 7,6%. Asimismo el empleo independiente creció 17,1% y congrega a 815.000 ocupados.
Con relación a los ingresos, la encuesta arrojó aumentos anuales tanto entre los asalariados como en los trabajadores por cuenta propia.
La incidencia del coronavirus
Si bien la irrupción del covid-19 tuvo efectos concretos sobre la inactividad, de los 2.407.000 personas inactivas solo 4.000 no buscaron empleo por razones vinculadas a la pandemia, aún cuando tenían deseos de trabajar, según los estudios.
En el peor momento de la crisis sanitaria que afectó a todo el mundo, esa cifra ascendía a 400.000 personas.
Por su parte, los inactivos con deseos de trabajar suman 236.000 personas, un número semejante al registrado antes de la pandemia, si esas personas hubieran salido a buscar trabajo, la tasa de desempleo subiría a 14,9%.
«Lamentablemente en junio tampoco vamos a mostrar cifras muy buenas, dado que marzo ya mostró cifras buenas y tiene esto de estacionalidad. Junio es todavía un poco peor, en general bajan las cifras del mercado laboral», explicó Flores.
«Por lo tanto, apostaría a que en septiembre empecemos a ver mayor recuperación, no solo anual, porque aquí hay recuperación en el año comparado al año anterior, pero estoy hablando también mirando las cifras del mismo año 2022», añadió.
Por último, Flores aseguró: «Esperaría que en septiembre-diciembre empecemos a mostrar algo de reacción en el mercado laboral, y eso va a depender de cómo esté la economía, de qué pasa con el crecimiento en general, y otras medidas de certidumbre o de incertidumbre que puedan existir», concluyó.
